×
×
Red Internacional
lid bot

CORRUPCIÓN EN BRASIL. La juventud tenía razón: el mundial del 2014 fue la Copa de la corrupción

Así lo confirman los testimonios de empresarios en los juicios de corrupción en el marco de la operación judicial “Lava-Jato”, que investiga los entramados de corrupción en Petrobras.

Martes 16 de mayo de 2017

En 2014, tras un año de lucha en las calles al grito de “no habrá Mundial”, la juventud junto con una histórica huelga de trabajadores del subte de San Pablo pusieron en jaque el Mundial: ¿a quién serviría? ¿Dónde iría todo ese dinero en realidad?

Todo el pueblo en Brasil sabe que las mega construcciones involucraron robos millonarios de dinero público mientras servicios básicos como salud y educación quedaron librados al deterioro y completo caos.

Sin embargo, para la “sorpresa” de los políticos brasileños -siempre últimos junto a los medios burgueses en enterarse lo que pasa en sus partidos- que negaron vehemente el robo corrupto, los testimonios realizados por las grandes constructoras Odebrecht y Andrade Gutierrez a la operación judicial Lava-Jato revelaron algunos pocos números de ese gran negocio que fue el Mundial para los empresarios.

Algunos números sí, porque como es sabido, la operación Lava-Jato es selectiva, no busca atacar la corrupción o sus raíces sino debilitar algunas figuras de los partidos tradicionales para recomponer por manos de la derecha la moral del sistema político brasileño y del igualmente corrupto poder judicial ante la población.

De los 12 estadios que fueron sede del Mundial, nueve ya fueron nombrados en los testimonios, involucrando el pago de coimas y la llamada “caja 2”, medio ilegal de financiamiento de las campañas políticas por parte de los empresarios. Solo el Beira-Rio de Porto Alegre y el Arena da Baixada de Curitiba se “salvaron”. El Arena Pantanal de Cuiabá no fue mencionado en estos testimonios pero también ha sido blanco de denuncias. Según una estimación, bastante dudosa y tirada para abajo, realizada por el poder judicial con base en cantidades y porcentajes nombrados en los testimonios -varias menciones no fueron seguidas de importes- por lo menos 129,9 millones de reales fueron a las manos de políticos y autoridades. No hay dudas que el valor real es sideralmente mayor.

Rio de Janeiro en el ojo de la tormenta

Ciudad campeona en colapso frente a la crisis económica, Rio de Janeiro también se ubica en primer lugar en lo que a corrupción en el Mundial se refiere. De acuerdo con relatos hechos por el expresidente de la constructora Odebrecht, Benedito Barbosa Junior a la fiscalía, solo el exgobernador de Rio Sérgio Cabral recibió 6,3 millones de reales en pagos ilegales relacionados con las obras. La defensa de Cabral, quien está preso desde noviembre en una penitenciaría de la zona oeste de Rio acusado varios crímenes, declaró que “nuestra manifestación se restringe a la instrucción del proceso penal”.

Otra acusación alcanza al presidente del Tribunal de Cuentas del Estado de Rio, Jonas Lopes. Según el exdirector de Odebrecht Leandro Azevedo, Lopes habría recibido 1 millón de reales en febrero de 2014 para aprobar el edital corrupto de concesión de Maracanã. El acuerdo sería de 4 millones de reales. La defensa de Lopes y de su hijo, Jonas Lopes de Carvalho Neto-a quien habría sido entregado el dinero- declaró al diario O Estado de S. Paulo, que ambos “celebraron el acuerdo de cooperación junto con el Ministerio Público Federal y, bajo los términos de ese acuerdo y sus matices, están legalmente impedidos de realizar cualquier comentario”.

La población de Rio de Janeiro quisiera saber dónde está el dinero que, sin dudas, fue robado a la población durante los mega eventos.

Todos los corruptos se dicen inocentes

Dos exgobernadores de Amazonas, actualmente senadores, Eduardo Braga (PMDB) y Omar Aziz (PSD) fueron acusados de recibir coimas de dos exejecutivos de la empresa Andrade Gutierrez. Clóvis Primo y Rogério Nora de Sá dijeron que a Braga fueron destinados el 10% del valor de la obra (salió por 660,5 millones de reales) y a Aziz el 5%.

Ambos lo negaron a través de una nota. “El testimonio es mentiroso. Aclaro una vez más que no participé de la gestión de ninguna obra para el Mundial de 2014. Salí del gobierno del Estado en marzo de 2010”, afirmó Braga. Aziz garantizó que resistió a la presión de AG por aditivos en la obra de la Arena y que el gobierno “siguió rigurosamente los valores orientados por los órganos de control y fiscalización”. “Nadie tiene más interés que yo en la conclusión de esta investigación”.

El juez de la Corte Luis Roberto Barroso autorizó la investigación de otro senador, Agripino Maia (DEM-RN), sospechado de haber recibido coima para ayudar en la liberación de recursos del BNDES al Arena das Dunas, en Natal. Maia, presidente del partido Democratas, rebate: “Estoy seguro que las investigaciones terminarán en la conclusión obvia: ¿qué fuerza tendría yo, líder de la oposición en la época, para liberar dinero del BNDES, ciudadela impenetrable del PT?”. Todo Brasil vio los pactos del PT con la “oposición” de derecha para favorecer a los empresarios, no puede ser que el senador nos considere tan inocentes como para creer que los dos partidos no se aliaron para lucrar con el Mundial.

Por otro lado, las constructoras que delatan algunos pocos aliados suyos en la corrupción para ganar, además de los premios, el perdón o renegociación de sus deudas con la Unión y de esa manera más miles de millones de reales, reiteran que están colaborando con la justicia a la clarificación de los hechos y que se “arrepienten de su pasado”. No es posible creerlo, sabemos que esos son quienes más ilesos saldrán de cualquier castigo relevante, porque son los verdaderos dueños de Brasil, como revela el acuerdo de indulgencia con Odebrecht.

Solo los trabajadores no tienen interés en salvar a algún corrupto, independientemente de su partido o de qué empresa rica sea parte. Por eso, los que somos los únicos que siempre perdemos, somos los únicos que podríamos juzgar con miras en nuestros intereses, garantizando la devolución inmediata del dinero robado y todos los costos correspondientes y el alejamiento permanente de esos ladrones de cualquier cargo.

Ese dinero no debe ir al juego sucio de la Lava-Jato para pagar nuevos premios a testigos corruptos, los corruptos no merecen premios por arrepentimiento. Defendemos que todo el dinero robado vuelva al lugar de donde nunca debería haber salido: los servicios públicos básicos de los que carecen tanto los trabajadores.

Para eso defendemos que todos los corruptos sean juzgados por jurados populares, lo que puede ser alcanzado mediante una verdadera huelga general que imponga elecciones de representantes para una nueva Constituyente Libre y Soberana, para cambiar las reglas de este juego donde los ricos siempre salen impunes y los trabajadores pagamos las cuentas con nuestras vidas.