La crisis energética producto de la guerra en Ucrania y las sanciones a Rusia está teniendo repercusiones inmediatas en Europa. Este jueves la mayor inmobiliaria de Alemania anunció que reducirá la temperatura de la calefacción en otoño. Mientras tanto continúa la ola de huelgas por salarios y contra la inflación.
Jueves 7 de julio de 2022 11:10
Vonovia, la mayor inmobiliaria de Alemania, ha informado a sus inquilinos que reducirá a partir del otoño la temperatura de la calefacción por las noches para limitar el consumo de gas ante el aumento de precios de la energía.
A la guerra en Ucrania y las sanciones a Rusia, que ya aumentaron el precio de los combustibles y la energía en todo el mundo, se suman huelgas de trabajadores, como la de los pretroleros en Noruega (finalmente prohibida por el Gobierno), que amenazan poner en jaque el abastecimiento de energía para la región a medida que se acerca el otoño y el gasto aumenta.
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Así, Vonovia anunció que restringirá la temperatura de suministro de la calefacción central entre las 23.00 y las 6.00 horas de forma que en las habitaciones sólo se pueda alcanzar una temperatura máxima de 17 grados, informaron medios de comunicación alemanes.
Durante el día no habrá restricciones y la medida no afectará el abastecimiento de agua caliente, que estará disponible las 24 horas del día.
Vonovia cuenta, según informaciones propias, con la administración de viviendas repartidas por Alemania, Suecia y Austria.
Debido a la escalada de los precios y la incertidumbre sobre el futuro del suministro de gas ruso, en Alemania crece la preocupación de cara al próximo invierno, y el ministro de Economía, Robert Habeck, ha llamado a los ciudadanos a ahorrar energía en la medida de lo posible.
No obstante, Habeck ha destacado en todo momento que en una situación de emergencia el suministro de gas para calentar los hogares tendría máxima prioridad y sería el último en ser desconectado.
Esta semana, una cooperativa de vivienda de Sajonia (este) saltó a los titulares al anunciar que racionaría el suministro de agua caliente a los vecinos para reducir costes.
Los anuncios de recortes en el suministro y la temperatura de la calefacción se dan en un marco de crisis por el aumento de precios que Europa no conocía hace décadas. Esto esta provocando una oleada de huelgas por aumento de salarios, en muchos casos estancados hace más de 10 años.
Muchas de estas huelgas se dan en posiciones estratégicas como los petroleros en Noruega y Francia (Total), los ferroviarios en Reino Unido y Francia, los trabajadores aeronauticos en varios países y trabajadores estatales, de la salud y la educación.
Es por esto que los Gobiernos están reaccionando buscando limitar e incluso prohibir las huelgas. En ese sentido se mueve el Gobierno alemán, también los hizo el recién renunciado Boris Johnson tratando de contratar rompehuelgas contra los trabajadores ferroviarios en Reino Unido, y lo acaba de hacer el Gobierno de Noruega al prohibir la huelga de los petroleros que amenazaba con cortar el sumunistro de energía a parte de Europa.
Sin embargo, las huelgas siguen adelante y empiezan a expresar la punta del iceberg de un descontento acumulado durante años.