Se trata de una nueva lista de políticos investigados por hechos de corrupción. La misma salpica a varios funcionarios del gobierno golpista y llegaría hasta el actual presidente.
Martes 14 de marzo de 2017 11:47
El fin de semana las redes sociales brasileñas estallaron con memes que se burlaban de las declaraciones de Michel Temer, que decidió abandonar la residencia presidencial junto a su familia, porque había "energía negativa", "quizás fantasmas". Más allá de los impulsos supersticiosos del golpista Temer, los fantasmas sin duda lo acosan. Pero no están en la residencia presidencial, sino en los pasillos de tribunales, en las declaraciones de los implicados en el caso Lava Jato, en la situación de la economía y, a partir de mañana, también en las calles con movilizaciones contra el intento de pasar una brutal reforma previsional.
Una larga lista de corruptos que salpica hasta a Temer
En el gobierno del golpista Temer y toda la clase política brasileña hay una creciente tensión por la inminente divulgación de una nueva lista de implicados en el escándalo de Petrobras. La lista salpicará a varios ministros y decenas de legisladores.
La misma fue elaborada por la Procuraduría General con base en los testimonios de 77 exdirectivos del grupo Odebrecht que detallan la participación de la empresa en esa trama de corrupción, además han aportado detalles sobre la actuación de un número indeterminado de políticos.
El procurador general, Rodrigo Janot, afirmó que puede presentar esa lista a la Corte Suprema en cualquier momento, aunque no ha confirmado la fecha, con lo cual la incertidumbre cundía en el Parlamento y casi todos los políticos ya que la trama de corrupción incluye a referentes de los principales partidos políticos.
Una vez entregada esa lista, que incluirá una serie de pedidos de investigación, el magistrado Luiz Edson Fachin, instructor del caso en el Supremo, deberá decidir si autoriza esas nuevas indagaciones y si los nombres de los políticos citados serán publicados.
Si bien hasta ahora, esos testimonios permanecen bajo secreto procesal, la prensa local ha obtenido informaciones sobre su contenido. Entre los datos filtrados figuran al menos dos de los más cercanos ministros del presidente del país, Michel Temer, a quien el escándalo también pudiera salpicar de alguna manera.
La situación parece más comprometida para el ministro de la Presidencia, Eliseu Padilha, una suerte de "mano derecha" de Temer, quien habría llevado adelante la negociación con Odebrecht de una financiación ilegal para campañas del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el propio mandatario.
Otros de los posibles sospechosos sería, según la prensa local, el nuevo canciller, Aloysio Nunes, quien asumió el cargo la semana pasada en lugar de José Serra y como él pertenece al Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que también estaría en lo que se conoce como "la lista de Janot", en alusión al procurador.
También se conoció, por las filtraciones que publicó la prensa brasilera, que los testimonios de los exdirectivos de Odebrecht pueden afectar a políticos de otras formaciones y en particular del Partido de los Trabajadores (PT), al que pertenecen los exmandatarios Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff, esta última destituida por el golpe institucional de agosto pasado.
El diario O Estado de São Paulo, uno de los que muestra su apoyo al actual gobierno, asegura que cinco de los siete ministros del Tribunal Superior Electoral de Brasil, encargados de juzgar si hubo irregularidades en el financiamiento de la formula Dilma-Temer, frenarían la investiagación para evitar una mayor crisis política en el país.
Si el tribunal encuentra que la formula electoral, que permitió a Temer ser vicepresidente, recibió dinero no declarado para su campaña, el actual mandatario podría ser depuesto del cargo.
En otro de los diversos flancos judiciales abiertos por la trama de Petrobras, el patriarca de la constructora, Emilio Odebrecht, fue interrogado por el juez Sergio Moro, responsable por el caso en la primera instancia, y aceptó que la empresa financió políticos en forma ilegal.
Según los abogados de Odebrecht, el responsable de la constructora afirmó que "eso siempre existió", que era "un modelo reinante" y que por eso mismo el grupo financiaba en forma "oficial y no oficial" a diversos partidos para unas mismas elecciones.
En medio de acusaciones y delaciones que implican directamente al actual gobierno golpista, Temer prepara un nuevo ataque contra los trabajadores con su reforma del sistema previsional.
Contra esa reforma y otras medidas ajustadoras del gobierno, varios sectores de trabajadores han llamado a un paro nacional para este 15 de marzo que puede transformarse en una gran jornada de lucha contra los ataques de un gobierno que no ha logrado revertir la crisis económica en el país y se encuentra cada vez más deslegitimado.
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