La utilización de los Payamédicos por parte del gobierno de la provincia para seguir maquillando la desidia en la que se encuentra la salud pública.
Sábado 22 de agosto de 2015
El día miércoles nos desayunamos con que en todos los hospitales de la provincia debe existir la figura del Payamédico gracias a un decreto firmado por Scioli, desde aparentemente, una idea del ministro Collia.
En primer lugar, es necesario aclarar que tanto los Payamedicos como todos aquellos trabajadores voluntarios que se encuentran actualmente en tareas en instituciones sanitarias públicas, hacen una tarea titánica, de gran valor que no sólo significa para el paciente un poco más de bienestar, sino que en muchos casos simplifican la tarea a los profesionales al hacer más amena la estadía de los pacientes, sobre todo pediátricos. En este sentido, el decreto viene a darle valores concretos a eso, permitiendo que se reconozca esta figura y que incluso puedan hacerse de más herramientas para avanzar en su tarea.
Ahora bien, como venimos denunciando en varias notas de LID, la situación en los hospitales públicos de la provincia de Buenos Aires es absolutamente crítica. Solo hace falta recorrer las distintas instituciones para comprobarlo. Comienza desde la atención más primaria: las “salitas” o los centros de atención primaria están absolutamente vaciados, los nuevos “UPA” (unidad de pronta atención) han sido una política desintegrada de una planificación superior donde los profesionales sean equipados y formados, y en la mayoría de las veces se encuentran un solo médico con una enfermera de guardia.
Y esto sucede sobre todo en aquellos distritos más populosos donde la demanda es altísima y la mayoría de las veces no recibe la atención que corresponde. Y continúa con hospitales que se caen a pedazos o hechos a nuevo pero vacíos con la consecuente falta de insumos. Hasta el enorme déficit de camas que hay en la provincia en General.
Así, los mismos que firman decretos que sirven de paliativos, pero no solucionan los problemas de fondo, son los responsables de que hoy, en lugares como La Matanza o Tres de Febrero, la población tenga que hacer malabares para conseguir un turno o una cama de internación con la atención que corresponde. Sólo una vez que logran esta verdadera hazaña, podrán tener el placer de ser visitados por los Payamédicos.
¿Porque los mismos responsables? De más está decir que Scioli luego de sus 2 gestiones, es el principal responsable político de esta situación, pero Collia, que habla en algunos medios de estos decretos y de su gran gestión debe estar olvidándose de su estadía como director del Hospital Carrillo y del Bocalandro, ambos con una enorme precariedad tanto edilicia como en lo que respecta a la situación del personal, que deben hacerse cargo, cual barco de los condenados, sin verdugo y látigo, pero con el peso enorme sobre su espalda, de la vida los miles más vulnerables de la población.
Ahora empezaremos a vivir las consecuencias sanitarias que traen aparejadas las aguas que ya se están retirando, y cómo nuevamente el estado, surge como un factor determinante a la hora de intervenir sobre la vida de miles que han perdido todo nuevamente y que luego deben soportar el peso de la falta de salubridad que trae aparejado la inundación sin la atención correspondiente.
Para insistir. En el año 2015 se incrementó en un 66% el presupuesto para el ministerio de seguridad, es decir, para la bonaerense y las policías regionales. Se aumentó en casi 40000 la cantidad de efectivos de la policía en este año. Un total de unos 24 mil millones.
Y sin embargo, para la salud de los trabajadores, este año se ha destinado apenas la mitad del presupuesto antes mencionado. Toda una muestra de la política que el actual gobernador de la provincia intentará implementar a nivel nacional.