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Red Internacional
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ARTE Y REVUELTA. Las Tesis: el arte en las calles junto a la lucha por el aborto legal

El colectivo interdisciplinario de mujeres participó del conversatorio “Artivismo y estallido social en Chile” invitadas por la CTA junto a otras artistas y militantes populares. Destacamos su intervención y reflexiones sobre el contexto chileno y sus prácticas artísticas.

Sábado 22 de febrero de 2020 11:00

Luego de su intervención en el pañuelazo del 19F impulsado por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto junto a cientos de organizaciones, “Las Tesis” participaron del conversatorio “Artivismo y estallido social en Chile”. Estuvieron en el panel artistas del Colectivo Fin de UN MundO, Clodet García artivista feminista, Viviana García, quien es Secretaria de Cultura de la CTA y Mavi Mateu por la Campaña por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito.

El masivo pañuelazo federal que tuvo su expresión a lo largo de todo el país, demostró que la “marea verde” sigue en las calles. Miles de personas organizaciones políticas y sociales seguimos exigiendo la aprobación del proyecto de ley presentado ya ocho veces y este año comienza otra etapa de la lucha. Alberto Fernández anunció que va a enviar a diputados un proyecto propio, contrario al construido colectivamente por el movimiento de mujeres y disidencias. Sin embargo, la marea verde no necesita otro proyecto, sino la aprobación del proyecto de ley para que dejen de morir mujeres por aborto clandestino.

Acompañando las demandas del movimiento feminista, la expresión artística y cultural tuvo una presencia muy importante en los últimos años. Lo que algunos llaman “Artivismo”, que en Argentina surge luego de las jornadas del 2001, son cientos de artistas, colectivos, colectivas, distintas organizaciones, que expresaron de las formas más diversas y creativas las demandas políticas de un movimiento heterogéneo.

El colectivo interdisciplinario de mujeres chileno es conformado por Paula Cometa, Daffne Valdés, Sibila Sotomayor y Lea Cáceres. Estuvieron presentes tres de ellas en la charla, rescatamos su intervención sobre su práctica artística y política en las calles alrededor de la revuelta social en Chile.

Sobre el contexto, el colectivo chileno decían: “Van cuatro meses de protestas. En la semana del 14 al 18 de octubre, con un movimiento estudiantil de estudiantes secundarios, que organizan a nivel estudiantil una evasión del metro en Santiago específicamente. Luego estas evasiones, que tienen su origen en la suba de tarifas, de 30 pesos chilenos, que acá son... no sé, tres pesos. Finalmente lo que el Ministerio de Transporte y el gobierno de Piñera creen es que es sólo la alza de tarifas lo que es el motor del estallido social, ya. De ahí viene la consigna “No son 30 pesos, son 30 años”, porque hace 30 años se firmó un pacto de transición a partir de un plebiscito en el que se vota que el dictador Pinochet y la Junta Militar sigan gobernando por ocho años más, finalmente ganó el NO, que era que no podían gobernar. Y los partidos políticos vuelven a aparecer luego de la dictadura y pactan esta transición. Por lo tanto le dan importancia a que hubo una democracia, ya.

Lo que pasó en octubre fue algo que se esperaba hace mucho tiempo, era un despertar de la consciencia, y no sólo de las conciencias estudiantiles y universitarias sino que fue algo más profundo. Eso pasó finalmente con las personas adultas, trabajadores y trabajadoras que también empezaron a evadir en el metro. De ahí la consigna “Evadir, no pagar, otra forma de luchar”. También ya había sido creada en el 2016 en otra alza la cual duró muy poco, generalmente duraba dos días. Esto ya lleva cuatro meses.”

Siguieron comentando cómo comenzó la revuelta: “El 18 de octubre, se inicia con algunos hechos importantes en Santiago en la capital, en donde se incendia la estación de metro Baquedano y otras estaciones más de la línea de transporte del subte. Se inicia ya el sábado 19 en Valparaíso y otras regiones las manifestaciones. Los supermercados allá son Wallmart, Cencosud, y comienza entonces una realidad no normal, luego salen los militares a las calles con preparamiento especiales, hay toque de queda, y con un gobierno de derecha. Ese es el contexto, ahora lo que hemos vivido es que todos los días ha habido protestas, al principio hubo protestas en todo el territorio, de norte a sur, de este a oeste, y en pueblos pequeños, en ciudades más grandes, despedazamientos de monumentos, incendios, saqueos a supermercados. Siempre en Santiago desde los barrios altos que bajaban a la Plaza de la Dignidad a marchar, se juntaron clases sociales, esto fue bastante interesante. La presencia de los militares, los toques de queda en Valparaíso eran desde las seis de la tarde, en Santiago desde las nueve de la noche. Luego empezó a decaer más esto en enero recién.”

“Las Tesis” dieron la vuelta al mundo con su performance “Un violador en tu camino”. Esta semana estuvieron presentes en el masivo pañuelazo realizado en la Plaza de los dos Congresos, donde la resignificaron poniéndose el pañuelo verde, reclamando por el derecho al aborto.

“A nosotras nos convocaron en Valparaíso, la semana del 20 de noviembre para poder intervenir en la calle con una acción que tenía que ver con un grupo de teatro que organizó a realizar barricadas, acciones performáticas de un período corto, en distintos momentos del día, en distintos puntos de la ciudad. A nosotras nos convocaron para el miércoles 20 de noviembre a la una de la tarde. Nosotras juntamos gente, alrededor de 40, 50 personas intervenimos con lo que ustedes ya conocen. También con un vestuario, que no era este vestuario, era un vestuario que tenía que ver con ponerse en la calle con un vestido de fiesta, un poco glam, digamos excéntrico. Lo que sucedió es que nos juntamos mujeres, disidencias, y realizamos esto en tres lugares, y el último lugar fue la casa de carabineros. Que desde el 18 de octubre estuvieron realizando detenciones, a mujeres, hombres, disidencias, a personas aleatorias, no precisamente a personas que estuviesen prendiendo las barricadas, los llevaban, los detenían, los desnudaban, los hacían hacer sentadillas. A las gente de las disidencias les introducían la luma, ese palo de madera por el ano. Se estaban viviendo cuestiones muy fuertes, que ya ponían en duda la cuestión de la democracia. Fuimos a hacerlo en la comisaría, y la respuesta de carabineros fue ´no tenemos miedo´. Una manifestación de putas y maricas, como literal, porque estábamos con brillos,con plumas, a las dos de la tarde... entonces decían ´que hacemos con esta huevaa, que hacemos con esto. No están tirando piedras´.”

Además ante la pregunta reiterada de porque tuvo tan masiva repercusión la performance decían: “(...) No sabemos. Tendrá que decirlo una persona con perspectiva. Pero yo creo que el sistema patriarcal es lo que está en crisis y en lugar donde nosotras vivimos es evidente. Se está quemando, no da para más, como que colapsó. Pero que tanta gente quiera hacerlo, que quiera tomarlo para expresar, es porque lo sentimos, lo sentimos en el cuerpo justamente. Lo vivimos, todas podemos sentir como no da para más, y ahí en lo colectivo nos encontramos todas, gritando, expresándolo, de otra manera. Ese pensamos es uno de los motivos.”

Actualmente en Chile bajó la masividad de las protestas, pero se abrió una reflexión profunda alrededor de las prácticas políticas en las calles. Las artistas reflexionaban al respecto:“Eso es el contexto, hoy hay protestas en algunas partes del país, la Plaza Dignidad sigue siendo un lugar de encuentro entre los manifestantes, ya no somos tantos. Si se junta el piquete de primera línea. En Valparaíso todos los días hay protestas violentas. Valparaíso es una ciudad muy pequeña, las calles son estrechas, entonces es más fácil que los autos policiales, la encerrona, baje por el cerro. Los vecinos se avisan por el cerro “vienen bajando”. Se ha logrado una organización social importante, barrial, vecinal, y en eso la intervención del feminismo, que también pudo poner en contexto la lucha feminista. Que ha sido una demanda apartada de todas las demandas. Eso es el contexto actual, en abril se va a hacer un plebiscito donde se espera que se apruebe el cambio de la Constitución, que es una Constitución que también está pactada en la dictadura de Pinochet y es la Carta Magna, que mantiene, conserva estructuras básicas de neoliberalismo, la familia como pilar fundamental, la educación subsidiada, la salud también, precarizado, donde el empresario tiene un derecho superior.”

Para finalizar se debatieron ideas alrededor del rol del arte en las calles, como estrategia, como fin en sí mismo, cómo poner el cuerpo; y más allá de las diversas visiones al respecto, todas y todes coincidían en seguir reflexionando sobre las prácticas artísticas alrededor de la revuelta social y su potencialidad.

“Las Tesis” concluían:“El arte no necesariamente pasa a ser una estrategia, sino es la lucha. En este caso la performance feminista, que es algo que a nosotras en particular nos interesa mucho, también esta hipótesis se corrobora un poco. Esa estrecha comunicación entre el cuerpo, mujeres y disidencias, en este caso desde el feminismo con lo colectivo y con lo político. Justamente el espacio. Porque también por un lado, está esta confinación histórica de la mujer al espacio privado, y cómo habitar el espacio público históricamente masculinizado que tiene una forma de manifestarse en lo político, que es distinta que es diferente.

Es muy interesante, cómo esta forma de vincularse a lo político, que es distinta a la masculina, a la hegemónica del espacio público, perturba al campo de poder finalmente. Que pasa que por ejemplo no saben que hacer, la respuesta de los pacos fue no tenemos miedo, porque de verdad no sabían qué hacer. Ahora ya no, la primera vez que la hicimos en Santiago ya sabían que hacer. Pero al principio no sabían qué hacer, y esa forma de desestabilizar la política institucional por un lado, las instituciones del estado, es muy potente. Una potencia que se ha complicado a partir de esta acción que pretendía ser más que una intervención sencilla, cómo se ha multiplicado por todos lados, es algo impresionante.

La lucha todavía sigue, por más que digan que esto está resuelto, no está resuelto. Tendremos que seguir luchando.”

Sobre qué cambió en el arte luego de octubre decían: “Surge la necesidad de manifestarse, de lanzarse, sin mayor miedo. Como que ya, fuera de la institucionalidad del arte, fuera del museo, fuera de la sala, sin técnica de por medio necesaria, sino tal cual poner el cuerpo. Poner el cuerpo. Muchas personas que quizás no se han vinculado nunca ni con la performance, ni con la danza, ni con la música, están dispuestos hoy más que nunca a poner el cuerpo en las calles. Y ponerlo por ejemplo al servicio de otras personas, de otras intervenciones que están generando, pero estar ahí haciendo en ese lugar. También han aparecido mucho, colectivo por ejemplo, los que hicieron el museo de la identidad, que se dedicaron a enmarcar. Cómo había tanto arte en la calle, gráfico y visual, tanto murales, etcétera; se dedicaron a enmarcarlos, para generar una especie de museo en la calle. Y ha pasado algo muy curioso, que la gente facha, que va y los pinta cachai. Con estos marcos ha pasado que pintan y lo que está dentro del marco no lo tocan. Porque no se atreven, porque el marco tiene una institucionalidad de arte. Es muy curioso, muy simbólico. Es momento de replantearnos también que entendemos por patrimonio, también ha sucedido muy rápidamente, discusiones en torno al arte, al patrimonio, a la cultura muy importantes. Comprender que ese patrimonio colonial, no es tu patrimonio, el patrimonio somos todes nosotres, entonces empezar a entender la historia de nuevo (…) muchos cambios en relación al arte ha habido.”


Carmela Torres

Nació en Gran Buenos Aires en 1987. Militante del PTS y miembro de Contraimagen. Licenciada en Artes Visuales de la UNA y maestranda en Artes Electrónicas de la UNTREF.

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