Se realizó un cine debate en el centro cultural "Bucare" de Ramallo del documental de las obreras de la fábrica recuperada Bruckman de cara al XXXI Encuentro Nacional de Rosario.
Jueves 6 de octubre de 2016 18:31
Mujeres trabajadoras y estudiantes se encontraron para debatir y organizarse para viajar al XXXI Encuentro Nacional de Mujeres. La naturalización del machismo, el acoso callejero y la violencia de género son las principales problemas que atraviesan a la localidad de Ramallo y sobre ello se discutió. Lo muestran el femicidio de Silvia Garcia, que se dio en noviembre del año paso o el de Leonela Barrios, en San Nicolás , no muy lejos de Ramallo .
Te puede interesa: Exigen justicia por el femicidio de Leonela Barrios
Se discutió sobre el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y la importancia de la lucha por la despenalización del aborto para que no sigan muriendo mujeres pobres por abortos clandestinos. Así fue el caso de dos chicas ramallenses hace unos años que conmovieron a la localidad. Casos que muestran las consecuencias de la clandestinidad por no recibir atención médica y la falta de Educación Sexual Integral.
También expresaron su preocupación por la creciente violencia machista, la pasividad de los funcionarios de la ciudad y el conservadurismo de algunos sectores políticos que no hacen más que culpar a las victimas y justificar al agresor. En el marco de un año lleno de ataques para la clase trabajadora, ajustes, tarifazos, despidos. Las mujeres se llevan la peor parte de esto no solo porque en la mayoría de los trabajos cobran menos que los hombres, si no por que también son el sostén del hogar, realizando trabajos no remunerados.
Además se dialogó sobre el contexto que atraviesa la provincia de Santa Fe. En contexto de “militarización en las calles” con el desembarco de Gendarmería Nacional, el pedido de “mano dura” en las dos marchas de la inseguridad, la complicidad policial con el crimen organizado, la trata de personas y el narcotráfico. Todo esto no hace más que aumentar la impunidad de las fuerzas represivas.
Por todo esto las mujeres de la localidad del norte bonaerense deciden participar del ENM para volver a sus casas, a sus puestos de trabajo o estudio con un plan de lucha concreto, dispuestas a combatir el machismo y reflexionando sobre la importancia de un movimiento de mujeres que salga a las calles a reclamar por sus derechos. Por esto mismo en los días previos al Encuentro Nacional van a seguir inscribiendo a las mujeres a los talleres y a participar con Pan y Rosas.