Así conquistamos nuestras demandas. Por eso, este 24 de Marzo tenemos que darle más fuerza a los sectores que están luchando, destacando su participación en las movilizaciones, para que se visibilice lo que los medios pretenden ocultar.
Jueves 18 de marzo de 2021 10:30
Existe una oleada de luchas en el país, una realidad que surge desde abajo que solo te muestra La Izquierda Diario.
Una de las más duras es la que está dando todo el pueblo de Pérez Millán para apoyar a los obreros de Arrebeef. Allí las mujeres de las familias trabajadoras estuvieron en la primera fila resistiendo a la represión de la policía de Berni. También luchan para no quedar en la calle, las trabajadoras de LATAM y otras trabajadoras y trabajadores de empresas tercerizadas del sector aeronáutico. Por eso el 8 de marzo, acompañaron a las mujeres de Guernica en el Obelisco, junto a trabajadoras de la salud, docentes y de otros barrios donde se organizan para luchar por vivienda. Ahora que estamos juntas… ahora sí, quizás, nos ven. Y así fue como los medios de todo el país tuvieron que hacerse eco de esta unidad forjada en las luchas.
Por eso, para que las mujeres que luchan por tierra y vivienda comiencen a coordinar con las trabajadoras de la salud que reclaman aumento de salario; para que las maestras que denuncian las condiciones laborales unan sus fuerzas con las que enfrentan los cierres y despidos en fábricas y empresas, tenemos que organizarnos y marchar juntas el próximo 24 de marzo.
Las compañeras de Pan y Rosas en todo el país participamos y apoyamos las iniciativas de todas las mujeres que están luchando para unirse en las movilizaciones. Marchar juntas porque es lo único que nos garantiza que se escuchen nuestras demandas y es el puntapié inicial para avanzar en la coordinación que la burocracia sindical se niega desarrollar. Para fortalecernos frente a la represión que los gobiernos de los dos lados de la grieta descargan sobre nosotras. Y para garantizar el triunfo de todas.
No es lo mismo marchar que quedarse en casa. En aquel golpe de Estado de 1976, que cada año repudiamos persistentemente junto a los organismos de Derechos Humanos, fue perpetrado por los militares genocidas que fueron el brazo armado de la misma clase social que hoy nos ataca: el gran empresariado y los dueños de la tierra. Con la dictadura genocida, a sangre y fuego, impusieron condiciones de mayor explotación, precarización, pobreza, desigualdad y entrega del país que hoy persisten.
Las mujeres lo sabemos: unidas y en las calles conquistamos nuestros derechos. Eso es lo que te proponemos, nuevamente, para este próximo 24 de marzo.