Martes 16 de abril de 2019 13:06
Después de la lluvia, desde temprano el día amagaba con encapotarse. Pero fueron pasando las horas y con ellas, salió el sol. En la puerta de la Universidad, se plantó una carpa roja con afiches, cartulinas y banners. Fue imposible para los alumnos que ingresaron no verlo, y por otro lado los volantes se repartieron de a cientos. “Están por todos lados”, fue el comentario de mucha gente. Una izquierda fuerte y multiplicada por cada rincón de la facultad.
El último jueves la directora del FMI, Christine Lagarde, daba una conferencia diciendo que “sería una tontería que cualquier candidato diera la espalda al trabajo que se está haciendo”, pidiendo que respalden su programa de ajuste. Tanto el gobierno de Macri, como el peronismo y kirchnerismo opositor ya reafirmaron que van a continuar pagando al FMI. Ese mismo día en la UNLaM miles de estudiantes recibieron la consigna del PTS: “Derrotemos al FMI, a Macri y los gobernadores”.
Esta idea, que solo propone la izquierda, resonó fuerte en toda la universidad, porque los jóvenes y las jóvenes precarizadas trabajadoras, a las que nos cuesta cada vez más ir a estudiar, pagar la sube, los tarifazos, que tenemos a nuestros viejos sin laburo, que nuestras hijas e hijos cada vez reciben peores y menores raciones de comida en las escuelas, sabemos que de la mano del FMI esto se profundiza y no viene nada bueno para el pueblo trabajador. Por eso las y los estudiantes tomaron en sus manos esta consigna, para repartirla en sus cursos, a sus amigos y familiares, porque organizándonos podemos terminar con este sistema que no tiene nada para ofrecernos.
Así durante todo el día trabajadoras del Hospital Posadas, trabajadores de la zona oeste y estudiantes de la universidad, más grande de la zona oeste con 55.000 estudiantes, estuvieron llevando esta propuesta con una muy buena recepción, ante la gran preocupación por la situación económica que se vive cotidianamente. Con sonido incluido, los alumnos se paraban a leer el material, que dejaba clara la propuesta de la izquierda “derrotemos al FMI, a Macri y a los gobernadores”, agregando inmediatamente “que la crisis la paguen los capitalistas, por un gobierno de los trabajadores”.
A medida que pasaba el día, más eran los estudiantes que se acercaban a dejar sus contactos para colaborar con la campaña, entusiasmados por la propuesta. “Armaron una movida que nunca vi en la UNLaM y nos trasladan los problemas que vivimos todos a la facultad”, comentaba una estudiante, contra lo que intentan imponer las autoridades y la liga federal que nada dicen del ajuste que se vive, ambos miembros del PJ que defendieron a este gobierno y al anterior.
“De repente ver en la facultad gente que te está diciendo que hay una deuda con el FMI y de pagarse, se va a ajustar y la gente se va a seguir cagando más de hambre todavía (que parecen cuestiones obvias, pero no lo son) está re copado, me parece re piola” fue la contundente respuesta de una de las estudiantes, mientras se multiplicaban los ejemplos con docentes que se quedaron leyendo la consigna e incluso personal no docente que trabaja en la universidad que se llevaron volantes para repartir a sus compañeros de trabajo.
Con esta actividad, las propuestas del PTS en el Frente de Izquierda llegaron a más de 10.000 estudiantes que se llevaron el volante con las consignas. La propuesta de derrotar al FMI, Macri y los gobernadores, y que la crisis la paguen los capitalistas, busca llegar a los trabajadores, los jóvenes y las mujeres para la pelea que, más temprano que tarde, va a darse en las calles. Difundir estas ideas, sumarse a colaborar, hacérsela llegar a cada amiga y amigo, compañero y compañera de cursada, familiar, es prepararnos para formar una gran fuerza social, que movilizada impida que esta vez nos puedan saquear y así dar una salida real a las penurias que vive el pueblo, un gobierno de los trabajadores. Mientras los dirigentes sindicales siguen en tregua, y el gobierno y la oposición pacta con el FMI, nosotros tenemos que convencer a cientos de miles de que sin derrotarlos a todos ellos no habrá ninguna salida para las trabajadoras y los trabajadores.