A pocos días de las elecciones municipales, entrevistamos a Asun, activista de Nou Barris de Barcelona y miembro de la agrupación de mujeres Pan y Rosas y que se presenta en las listas municipales por la CUP Capgirem Barcelona.
Viernes 24 de mayo de 2019
A pocos días de la celebración de la jornada de elecciones autonómicas y municipales en el Estado español, pero también a nivel de europeas, hablamos con Asun, vecina y activista social del barrio de Nou Barris (Barcelona) y miembro de la agrupación de mujeres Pan y Rosas.
Asun se presenta en las listas para las municipales en la candidatura de la CUP Capgirem Barcelona y aprovechamos uno de los últimos actos de campaña para intentar abordar con ella algunos de los temas que más sacuden a la clase trabajadora y a las mujeres trabajadoras en especial.
Como mujer trabajadora, ¿cómo ves en la actualidad la situación laboral?
A las mujeres nos cuesta más acceder al mercado laboral, lo hacemos en peores condiciones. La precariedad afecta a todos, pero a nosotras nos va la vida en ello. Las mujeres copamos la mayoría de trabajos temporales y representamos el 75% de jornadas a tiempo parcial. La gran mayoría no tiene una jornada que les garantice unos ingresos dignos.
Y después tenemos la brecha salarial. Las mujeres cobramos un 30% menos que los hombres por desarrollar el mismo tipo de trabajo. Y lo más grave es que esta brecha cada vez se está haciendo más grande. Las mujeres también representan el 50% de la población parada.
¿Cómo afecta todo ello a la vida familiar de las mujeres?
Si hablamos de conciliación de vida laboral y familiar, desde pequeñas recibimos la consigna moral y social de que tenemos que ser madres. Sin embargo, una vez te quedas embarazada el mercado laboral te expulsa. Un hecho tan natural como es la maternidad y crianza, hoy en día se convierte en una gran limitación y motivo de discriminación en el mercado laboral.
La imposibilidad de conciliar los horarios laborales con las tareas reproductivas, que recaen siempre en las mujeres, supone una total limitación para poder integrarse en el sistema laboral, ocupando así los sectores más precarizados. De aquí la necesidad de socializar el trabajo reproductivo y de cuidados y liberar a la mujer de esta pesada carga.
En estos cuatro años de gobierno municipal de Barcelona en Comú, ¿crees que se han puesto soluciones para resolver esta situación?
La precariedad no cae sola del cielo, es el modelo laboral capitalista creado por los gobiernos del PP y del PSOE a lo largo de las décadas de los 80 y 90 y no olvidemos que en Catalunya fueron apoyados por los partidos de la burguesía catalana. Pero es que hasta los mal llamados "gobiernos del cambio" como Barcelona en Comú han seguido esta senda. Hemos visto como desde el ayuntamiento han ido en contra de las luchas de las trabajadoras como es el caso de la lucha del metro o las trabajadoras del Servicio de Ayuda Domiciliaria, las cuales pelean por la municipalización del servicio.
Hoy los "gobiernos del cambio" son los que hacen negocio con la externalización de los servicios públicos, precarizando las condiciones laborales y rebajando la calidad de los servicios. Un ejemplo de ello, como digo, son las trabajadoras del SAD. En Barcelona son más de 4.000. Todas mujeres trabajadoras invisiblizadas, pero no invisibles. Ellas son las que cocinan, limpian y atienden a las personas dependientes. Sin embargo, el Ayuntamiento de Barcelona en Comú le ha concedido el contrato de este servicio a la empresa Accent Social, propiedad de Florentino Pérez, presidente del Real Madrid y de una de las grandes constructoras. Imagina los grandes beneficios que genera el sector de cuidados para que las grandes constructoras se metan a costa de la precariedad de sus trabajadoras.
Por eso, yo creo que la lucha contra la precariedad femenina tiene que ser una lucha conjunta con toda la clase trabajadora. Porque somos la única clase que tiene el potencial para romper las cadenas de opresión y explotación de este sistema capitalista.
¿Qué salida hay para enfrentar todos estos ataques capitalistas?
Frente a un régimen gobernado por los partidos capitalistas, como mujer trabajadora considero que como clase trabajadora necesitamos una organización que defienda nuestros intereses. Pero no solo para nuestras demandas laborales o nuestras demandas feministas, antiracistas y anticapitalistas, sino también nuestras demandas democráticas como es la lucha por la autodeterminación del pueblo catalán.
Solo la clase trabajadora podrá romper el Régimen del 78 de forma independiente de los partidos capitalistas. No solo el PP y el PSOE, sino también los partidos de la burguesía de Catalunya, los cuales nunca defenderán los intereses de nuestra clase. Por eso considero que la política de “mano extendida” de algunos sectores de la izquierda independentista fue un error. La república se hará efectiva independientemente de estos partidos, porque la república será obrera o no será.
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