En la madrugada de este martes 16 de febrero un dispositivo policial ha irrumpido en el rectorado de la Universitat de Lleida donde Pablo Hasél se había encerrado para enfrentar su encarcelación. La policía ha desalojado a todas las personas hasta detener a Pablo. Este ataque a las libertades democráticas no puede quedar impune, debemos extender la rabia y la solidaridad por los barrios, los centros de trabajo y de estudio ¡Amnistía total ya!

CRT Estado Español Corriente Revolucionaria de Trabajadores y Trabajadoras | @CRTorg
Martes 16 de febrero de 2021
El Régimen del 78 ha conseguido detener a Pablo Hasél en la madrugada de este martes 16 de febrero, el rapero que lleva años denunciándolo, un auténtico ataque a las libertades políticas y de expresión. Sin embargo, desde que la Audiencia Nacional estableció la orden judicial que lo obligaba a ingresar en prisión, las movilizaciones de apoyo se extendieron por ciudades de todo el Estado español y la solidaridad ha cruzado las fronteras.
Hasél ha plantado cara a la represión y por ello se encerró este domingo en el rectorado de la Universitat de Lleida, para resistir junto a cientos de personas su encarcelamiento. Mientras, el Govern de la Generalitat enviaba refuerzos a la policía autonómica, los mossos d’esquadra: los partidos del procesismo también son responsables de la detención. Y el rector ha dado permiso para que entre la policía a una facultad. Todos cómplices de sus carceleros.
Este acto de resistencia de Pablo Hasél en sus últimos momentos de libertad ha sido la mejor denuncia a un Estado que reprime a artistas, periodistas, políticas o sindicalistas. Ha sido un llamado a la lucha y la solidaridad que toda la izquierda tenemos que tomar.
Todas las organizaciones sociales, políticas y sindicales debemos movilizarnos hasta conseguir la amnistía total. No hacerlo sería ser cómplice de un Estado criminal al servicio del IBEX35, de su sistema judicial y sus cuerpos represivos heredados de la dictadura, y de una Monarquía que quiere silenciar a un rapero que denuncia su corrupción y sus crímenes.
Mientras policías torturadores, así como banqueros, políticos y miembros de la Casa Real corruptos quedan en impunidad, luchadoras y luchadores viven día tras día la represión política. Todo esto con la complicidad del Gobierno “progresista” del PSOE y Unidas Podemos que no sólo no ha denunciado la detención de Pablo Hasél, ni se ha planteado en ningún momento la amnistía, ni siquiera el indulto, sino que incluso se ha pronunciado a favor de su encarcelación desde la Fiscalía. Comprensivos y “demócratas” cuando se trata de la extrema derecha, carceleros cuando se trata de Hasél y de la izquierda combativa que no baja la cabeza. Es inaceptable y no les puede salir gratis políticamente.
Por ello desde la Corriente Revolucionaria de Trabajadoras y Trabajadores (CRT) y desde la juventud anticapitalista de Contracorriente hacemos un llamado a la movilización, a sumarnos a todas las convocatorias y a seguir organizándonos desde los barrios, centros de trabajo y de estudio hasta conseguir la amnistía total de Pablo Hasél y todos los presos políticos.