Reproducimos la transmisión en vivo realizada por Casa Marx Zona Oeste con Raúl Godoy obrero de Zanon y ex diputado provincial.
Domingo 19 de abril de 2020 15:26
Como parte de la serie de transmisiones en vivo impulsadas por Casa Marx Zona Oeste, esta semana tuvimos una conversación muy amena con Raúl Godoy, obrero de Zanon y ex diputado provincial de Neuquén.
En momentos donde la mayoría de la clase trabajadora está sufriendo las consecuencias económicas de la cuarentena obligatoria, las gestiones obreras no son la excepción. A pesar de venir pidiendo respuesta de los gobiernos hace años y no obtenerla, apenas empezó la pandemia las gestiones obreras pusieron a disposición sus fábricas, incluso reconvirtiéndose como hicieron en la gráfica Madygraf que ahora produce liquido sanitizante.
Raúl nos contaba que hablaron con el rector de la UNCo para ponerse a disposición “con compañeros mecánicos que pueden ayudar a reparar o fabricar respiradores” pero les dijeron que “el gobierno nacional no les está mandando insumos para en gel” mientras los grandes laboratorios y farmacias se siguen llenando los bolsillos y nadie sabe que aportan en esta crisis.
También nos contó cómo ve la situación de los trabajadores frente a la cuarentena “el quédate en casa que se hizo famoso este tiempo no es para todos, hay millones de trabajadores que no pueden hacerlo. ¿Quién te saca la basura todos los días? ¿Quién te vende comida? Esos sectores que están trabajando tienen que tener garantías que no tienen. Con esta cuarentena y los trabajos esenciales nos damos cuenta que los trabajadores son los que mueven el mundo”.
Para cerrar charlamos de la necesidad de la organización de los trabajadores para enfrentar los despidos y la normalidad que quieren instalar con la policía en las calles mientras miles se quedan sin trabajo. En referencia a esto Raúl decía que “después de esta situación nada va a ser igual, el tema es si salimos organizados. La patronal está muy organizada, el Estado está muy organizado con la policía, gendarmería, el ejército. Tiene todo, según ellos, ‘bajo control’. Pero este control no es por la pandemia, quieren ejercer un control social para que cuando la gente pelee su puesto de trabajo puedan reprimir. Como hicieron en el frigorífico Penta”.
Para cerrar remato el vivo con la frase “muchos se tiene que poner el barbijo pero se tienen que sacar la gorra” en referencia a los llamados a denunciar a la gente que no hace la cuarentena, que en su mayoría son los laburantes que mantienen el mundo en pie.
