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Red Internacional
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DERECHO AL ABORTO. Los increíbles argumentos de García Larraburu (FPV) para votar contra las mujeres

La senadora kirchnerista dijo que el proyecto “nació viciado”, acusó de violentas a los colectivos feministas y cerró con una frase del caudillo Urquiza.

Miércoles 8 de agosto de 2018 21:16

A nadie sorprendió su posición. Hace 10 días había posado junto a Cristina Kirchner y todo el bloque del FPV que juraba votar unánimemente a favor, pero esta semana se “rectificó” y anunció su voto en contra.

Lo que sí sorprendieron a muchos fueron sus argumentos en el recinto. Primero, en un rapto de cordura aseguró que “seguro a algunos hoy defraudaré”, aunque sin decir a quiénes. ¿Se refería a los cientos de miles de mujeres que se habían movilizado hoy para que no les roben sus derechos? ¿O a las que seguirán expuestas al aborto clandestino?

A partir de ahí intentó armar su justificación. Para García Larraburu el tema es que “no era el momento adecuado” para tratar el proyecto, un proyecto que además "nació viciado”. ¿Se habrá olvidado que es el proyecto que impulsa la Campaña Nacional por el Aborto Legal desde hace 13 años, incluído el gobierno kirchnerista?

Más tarde ensayó un argumento sorprendente: “es un proyecto que nada tiene que ver con nuestra idiosincrasia, es una solución escandinava para un país que en muchas cosas se parece a Haití”. Así, la pobreza y el atraso del país sería un argumento para seguir condenado a la muerte a miles de mujeres, justamente las más pobres.

Y para defenderse, la senadora kirchnerista también eligió atacar. “Las militantes de género han sido las más violentas al momento de comunicarse conmigo” intentó ensuciar García Larraburu.

Pero a pesar de eso no tiene rencores, por eso aseguró que ansía “que podamos trabajar abrazados en la diversidad”. Porque, está convencida, “un horizonte de grandeza no se edificar sin el rol fundamental de la familia”.

El final tuvo su condimento especial. Luego de hablar sobre los proyectos que había presentado y las causas “populares” que defendía, eligió una frase célebre para terminar. ¿De una mujer? No, del estanciero y caudillo entrerriano Justo José de Urquiza: “no habrá ni vencedores ni vencidos”.

Con ese cierre “memorable”, la senadora kirchnerista adelantó su voto contra el derecho de las mujeres.

Las repercusiones en las redes sociales no tardaron en llegar.