La aerolínea alemana Lufthansa ha cancelado el miércoles unos 930 vuelos con origen o destino en los aeropuertos de Fráncfort, Múnich y Düsseldorf, en la quinta jornada de huelga del personal de cabina.
Jueves 12 de noviembre de 2015
Foto: Aviones parados en el aeropuerto de Frankfurt, Alemania, EFE/EPA/FREDERIK VON ERICHSEN
La suspensión de los vuelos afectará a alrededor de 96.000 pasajeros. "Lamentablemente así es como comenzamos el día", declaró un portavoz de la mayor compañía aérea alemana, quien agregó que a lo largo de hoy se decidirá cómo afrontar el día jueves.
La aerolínea dijo que trata de informar "lo antes posible" a los clientes "de lo que les espera", pero a primeras horas de la mañana era imposible pronosticar como se desarrollará la situación, según explicó. La patronal alemana intenta, como siempre en este tipo de huelgas, utilizar la opinión pública en contra de los trabajadores, denunciando la pérdida de vuelos para los clientes, como si no fuera su responsabilidad.
Los tribunales laborales de Darmstadt y Düsseldorf llegaron ayer a conclusiones distintas sobre las acciones de protesta.
Así, el tribunal de Darmstadt no puso objeciones a los paros convocados en Fráncfort y Múnich, al considerar que el sindicato Ufo había formulado de forma suficiente sus objetivos.
En cambio, el de Düsseldorf declaró la huelga ilegal, aunque sólo en relación a las acciones del aeropuerto de esa ciudad y únicamente para el mismo martes.
A continuación, Lufthansa presentó un nuevo recurso judicial de urgencia contra la huelga, con el fin de poner fin a los paros que el sindicato tiene previsto mantener hasta el viernes por la noche.
Lufthansa canceló el martes, en la cuarta jornada de huelga del personal de cabina, un total de 136 vuelos -126 intercontinentales y 10 conexiones dentro de Europa- en los aeropuertos de Fráncfort, Múnich y Düsseldorf, cancelaciones que afectan a 27.300 pasajeros.
La última oferta de la aerolínea para poner fin cuanto antes a la huelga que arrancó el pasado viernes, contemplaba elevar hasta 3.000 euros el pago de una paga única a los 19.000 auxiliares de vuelo.
Asimismo Lufthansa se comprometió a pagar prejubilaciones a partir de los 55 años por la cantidad actual y no a partir de los 56 como había propuesto anteriormente.
La compañía ofreció asimismo a sus auxiliares de vuelo un aumento salarial del 1,7 % con efectos a partir de enero de 2016 y de otro 1,7 % a comienzos de 2017.
Sin embargo, los trabajadores de cabina mantienen la huelga, porque siguen exigiendo que no se recorten su sistema de retiros.
La compañía aérea alemana viene intentando apretar la soga de los trabajadores, como forma de competir “en mejores términos” con empresas de Low cost en Europa. Desde 2014, los pilotos han realizado 13 huelgas, a lo que ahora se suma el personal de cabina.
