La administración de un centro escolar suizo, cuando considera que un atuendo es demasiado provocador, obliga a las estudiantes a ponerse una «camiseta de la vergüenza», en la que figura la siguiente inscripción: «me visto de forma apropiada».
Viernes 2 de octubre de 2020
En las declaraciones recogidas por el periódico suizo Le Courrier , una joven declara : « Desde que llegué al instituto me amenazan continuamente con imponerme la «camiseta de la vergüenza». Esta alumna de ESO del instituto Pinchat de Suiza y otras diez compañeras han recibido una sanción bien singular: el uso obligatorio de «la camiseta de la vergüenza». Una camiseta de talla XXL con la siguiente inscripción: «Me visto de forma apropiada».
Este es el castigo humillante reservado a aquellos, y especialmente a aquellas, cuyo atuendo es inaceptable según el criterio del personal administrativo del centro. Tops demasiado cortos, shorts demasiado bajos, tirantes demasiado finos, hombros descubiertos: si bien la normativa interna exige llevar una «vestimenta adecuada», no se precisan los detalles y por lo general es el profesor el que fija las pautas. Sin embargo, a tenor de los testimonios publicados (casi un centenar) en la cuenta Instagram Sexisme Genève, son casi exclusivamente las chicas las que pagan el precio: «Una de mis profesoras dijo que mi ropa no era adecuada porque confundía a los chicos.», explica una alumna. Una de las creadoras de la cuenta Instagram continúa: «Lo que molesta de estas chicas no es lo que llevan puesto, sino lo que dejan entrever. Las niñas que entran en este ciclo tienen entre 11 y 12 años. Algunas ni siquiera han terminado la pubertad, y ya se les está inculcando que sus cuerpos son problemáticos. De cara a los chicos de su edad, pero también de cara a los profesores que, al parecer, encuentran a estas chicas provocativas. ¡Es la mirada de los adultos lo que las sexualiza!»
Se tarda casi media hora en distribuir las camisetas a las chicas en cuestión. Por lo tanto, durante esa media hora, las estudiantes no asisten a clase. Les ofrecen una sola alternativa: «mandarlas a casa para que se cambien de ropa» tal y como especifica un correo de la dirección. En ambos casos las estudiantes se quedan desamparadas frente a una administración que parece más centrada en elegir sus atuendos que en ocuparse de su educación. En los grupos de padres de alumnos, surge la duda…
Sin embargo, los testimonios recogidos no se limitan a esta institución. La práctica parece haberse generalizado en las escuelas privadas, públicas, religiosas, tanto en Suiza como en Francia, y en todas ellas parece evidente que concierne principalmente a las niñas.
Entonces, ¿hay sexismo en el sistema educativo de Ginebra? Pierre-Antoine Preti, director de comunicación del Departamento de Educación Pública local, se defiende: «El DIP está muy sensibilizado con la cuestión de la igualdad y no hay un trato desigual entre niñas y niños en el seno de la escuela.»
Afirmaciones que quedan en entredicho según los testimonios del alumnado: «Oficialmente la regla concierne a todo el mundo. Pero nunca he visto ningún chico con la camiseta, aunque vaya enseñando la mitad del bóxer.»
La polémica nos hace pensar en la campaña #14Septembre2020* y en las declaraciones al respecto del Ministro de Educación francés, que habría comentado, en una intervención que ha sido ridiculizada muchas veces: «Venimos a la escuela vestidos de forma republicana». Y aunque sus declaraciones sean irrisorias, la intención sigue siendo la misma a ambos lados de la frontera (francosuiza): propagar un control político cada vez más autoritario sobre el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo, inculcarle la sumisión desde muy joven y sexualizar de modo nauseabundo el cuerpo femenino sin el consentimiento de la mujer: tomemos como ejemplo a los numerosos reaccionarios de todo pelaje que desde hace semanas se ensañan en establecer, centímetro a centímetro, cómo deberían vestir las mujeres. ¿El velo? Demasiado largo. ¿La falda? ¡Demasiado corta!
Se diría que las primeras interesadas son las últimas en opinar…Demasiado largo, demasiado corto, les corresponde a ellas decidir cómo vestir.
*El hashtag #14septembre, denuncia los reglamentos impuestos por diversos institutos franceses a propósito de la conducta vestimentaria que las estudiantes deberían acatar. El 14 de septiembre se hizo un llamamiento a través de las redes sociales (TikTok principalmente, ya que se trata de un movimiento que atañe a chicas muy jóvenes,) para que las estudiantes de ESO fuesen a clase vestidas con «prendas provocativas» (shorts, cropt tops etc).
Artículo original en francés: Sexisme dans un établissement Suisse : le "t-shirt de la honte" pour punir les élèves vêtues "trop court"
Traducción: Maite.