Algunos debates que dejó la semana de justificaciones machistas del presidente del fútbol español Luis Rubiales y la respuesta de Jenni Hermoso y las jugadoras de la selección femenina. ¿Solo un beso? Columna de cultura de El Círculo Rojo (jueves a las 22 a 24 en Radio Con Vos FM 89.9).
Celeste Murillo @rompe_teclas
Viernes 1ro de septiembre de 2023 01:27
· No deja de crecer el escándalo alrededor de los acontecimientos en la final del Mundial de fútbol femenino. Las jugadoras de la selección española recibían sus medallas y el presidente de la Federación de Fútbol, Luis Rubiales, besó a la jugadora Jenni Hermoso sin su consentimiento.
· Lo que vino después fue una seguidilla de discursos y justificaciones machistas y un repudio generalizado. En algunas ciudades del Estado español hubo protestas.
· El presidente de la Federación actuó con impunidad porque sabe que:
· La Federación Española ignoró los reclamos de las jugadoras durante años (quince jugadoras fueron obligadas a renunciar por esos reclamos) y en la primera conferencia prácticamente lo homenajeó.
· Cuenta con la protección mediática de los canales deportivos por el negocio que representa el fútbol y con el silencio de la liga masculina (solo tres jugadores de primera división se pronunciaron).
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· El presidente Pedro Sánchez tuvo que pronunciarse y pidió la intervención del Tribunal Disciplinario del Deporte (una medida simbólica pero con impacto político en este contexto).
· La FIFA, muy lejos del feminismo, sí decidió suspender a Luis Rubiales de su puesto en la UEFA (Unión Europea de Asociaciones de Fútbol). Se espera que la federación española actúe en sintonía, no porque defienda los derechos de las jugadoras sino por la disputa de la sede mundial de 2030.
Mirá la columna completa
· El impacto fue mucho más allá del acontecimiento puntual. En su columna de elDiarioAr, la escritora y filósofa Tamara Tenenbaum habla del hartazgo que provocan estos hechos.
· Señala algo importante, que no hay que caer en la falacia de aceptar lo que dice Rubiales, que “el beso no es grave”, pero tampoco en la otra, de tener que explicar que para Jenni Hermoso es un trauma.
· No es necesario que algo sea traumático para que sea un problema. El acoso en el trabajo, que sufren mayoritariamente las mujeres y las personas LGBTIQ+, muchas veces son cosas que no aparecen como graves o traumáticas (que te toquen el culo, chistes machistas, comentarios desubicados). Provocan que no participes de ciertas actividades, no hables con ciertas personas y, en consecuencia, se limitan tus oportunidades en ese trabajo.
· Tenenbaum plantea una preocupación que comparto, complicada en un contexto en el que se reproducen distintas violencias. Escribe que no quiere “colaborar con las narrativas que hacen de toda agresión sexual un trauma, que suponen que las mujeres somos frágiles y que estas cosas nos rompen. La mayor parte de las veces estas agresiones no nos rompen: nos cansan”. Algo que se ve en las declaraciones de Jenni Hermoso, en lugar de estar festejando uno de los mayores logros de su carrera deportiva.
Consentimiento y después
· La otra discusión que reapareció es la del consentimiento, una idea que viene estando en debate. No porque no sea algo deseable, sino porque se identifican condicionantes y límites para que funcione como protocolo de relaciones (algo muy difícil).
· El buen sexo mañana. Mujer y deseo en la era del consentimiento (Alpha Decay, 2021) es un libro de Katherine Angel. La autora analiza lo que denonmina “cultura del consentimiento”, es decir, que bastaría con verbalizar de forma explícita tu deseo, que se conoce como “consentimiento positivo o entusiasta”. En teoría esta idea complementaría las primeras nociones que se centraban en el rechazo (“no es no”).
· El libro tiene varias reflexiones interesantes, como las consecuencias de instalar discursos que sugieren que las mujeres deben comportarse de cierta manera para evitar la violencia. Pero aborda sobre todo el problema de que el consentimiento funciona en un contexto lleno de problemas.
· ¿Qué pasa cuando una mujer no puede o le es difícil decir que no? ¿Qué pasa cuando el NO carece de valor? ¿Cuando hay una relación de poder?
· ¿Dónde ubica este discurso a la persona que “debería” haber dicho que no claramente y no lo hizo? Lo que vemos hoy en los videos que muestran de Jenni Hermoso, dando a entender que ella no dijo NO lo suficiente.
· Me parece interesante pensar siempre qué discursos terminan circulando cuando el debate deja de ser atractivo para los grandes medios.
Protagonistas
· Hace unos días entrevistaron a Catalina Coll, la arquera de la selección española y ella dijo que las jugadoras habían dejado de ser las protagonistas del Mundial. Imagínense que algo así hubiera borrado el triunfo de Argentina en Qatar.
· Catalina dijo que estaba decepcionada porque “todo el mundo que te para por la calle te habla de esto y no te dice: ‘Felicitaciones por el Mundial’. “Que al final somos futbolistas y queremos jugar al fútbol y que se nos respete”. Ni más ni menos.
Celeste Murillo
Columnista de cultura y géneros en el programa de radio El Círculo Rojo.