El presidente comenzó su actividad en el gigante asiático con un encuentro con su par Xi Jinping.
Juana Galarraga @Juana_Galarraga
Sábado 3 de septiembre de 2016
Mauricio Macri se encontró con su par chino, Xi Jinping, en lo que constituye su primera reunión planteada en el marco de su actividad en la cumbre del G20. Es la primera vez que Macri participa de esta instancia internacional, que se desarrollará en el país asiático entre el domingo y lunes en la ciudad de Hangzhou.
La entrevista entre el jefe del Estado argentino y el mandatario chino, tuvo lugar en la Casa de los Huéspedes del Estado del Lago Oeste de Hangzou entre las 22 y las 22:20 de Argentina (9 a 9:20 de la mañana del sábado en China). Macri concurrió acompañado por el embajador argentino en China Diego Guelar; la canciller, Susana Malcorra, el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo; el secretario de Hacienda y Finanzas Públicas, Pedro Lacoste, y colaboradores.
En los últimos días el presidente realizó diversas declaraciones sobre sus expectativas puestas en la cumbre de los jefes de Estado. Entre otras cosas aseguró que participará con “ la clara intención de trabajar junto a los países más poderosos del mundo en la lucha contra el narcotráfico, la pobreza y el terrorismo". "Vengo a confirmar aquí mi vocación de colaboración y de trabajo que hacemos en la Argentina para luchar contra los grandes males de la humanidad", sostuvo y afirmó que no va a ir a las reuniones “a decirles lo que tienen que hacer ellos, sino con humildad a decirles que queremos también trabajar junto a ellos”.
Según publicó La Nación, esta reunión es importante para Macri “porque es su primera cumbre de peso internacional, porque se mostrará como líder regional y porque ya han pasado nueve meses desde que asumió y quiere mostrar una cara nueva de la Argentina”.
Sin embargo, esta presentación de su nueva cara como líder regional ante los líderes de los países “más poderosos del mundo” fue opacada por un pequeño error. Los organizadores del evento confundieron a Mauricio con su padre, Franco, cuya imagen aparece junto a la bandera nacional en un flyer de difusión, como si fuese el actual presidente argentino.
Búsqueda implacable
Como en la mayoría de los viajes oficiales del presidente, el objetivo en esta ocasión también está puesto en atraer inversiones al país. “La lluvia” prometida en campaña, hasta el momento no llega ni a garúa. Esta no es la única promesa incumplida. El presidente habla ante el mundo como un sujeto comprometido con el combate a la pobreza. Mientras, en su país, el número de pobres sumó a 1.400.000 personas más en lo que va de su gobierno, producto de la política de ajuste que implementa. ¿Pobreza cero…?
En este contexto, las negociaciones con China podrían significar un avance en los planes empantanados del Gobierno. En este punto, quien brindó extensas declaraciones fue el embajador Guelar.
Los proyectos de inversión de China en el país suman 25.000 millones de dólares. Entre las inversiones “hay proyectos energéticos eólicos solares en Jujuy, La Rioja, San Juan; un acueducto en Entre Ríos; dos empresas hidroeléctricas que ya cerraron acuerdos y dos platas nucleares”, sostuvo Guelar a la agencia Telam.
La idea de la inversión de 25.000 millones de dólares que implican los acuerdos con China entusiasma a Cambiemos. Sin embargo, ante la expectativa que genera el interés chino, Guelar recomendó tener paciencia, lo que podría considerarse a esta altura como una muletilla de Cambiemos. "Hay que generar confianza en la nueva administración, es un proceso que lleva tiempo. Quizás el error del Gobierno fue crear una expectativa exagerada. Yo creo, con el mayor optimismo, que los resultados se verán no antes de dos años".
El diplomático detalló que el presidente visitaría China "en el primer trimestre" del año próximo. Además, en el último trimestre el presidente Xi Jinping vendría a la Argentina.
"Le estamos proponiendo a China avanzar en la situación que se ha esbozado: queremos proveerla de alimentos. Materia prima y alimentos elaborados", amplió. Guelar hacía referencia a un proyecto que apuntaría a crear una "zona de seguridad alimentaria y sanitaria" entre ambos países, que facilite el comercio.
Agenda política y empresarial
Además del encuentro con Xi Jinping, Macri tiene pautadas otras reuniones bilaterales. La participación en los foros de la cumbre propiamente dicha, en la que tiene previsto hacer dos intervenciones de ocho minutos cada una, tendrá lugar entre el domingo y del lunes.
Macri también se reunirá con el presidente ruso Vladimir Putin. Luego asistirá a reuniones con el presidente del Estado Español, Mariano Rajoy; el primer ministro de Australia, Malcom Turnbull; el premier de India, Narendra Modi y posiblemente concrete una reunión con el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma.
A su vez el presidente definió participar de lo que se conoce como la cumbre del B20, que congrega a empresarios de los países desarrollados, instancia en la que también hablará.
Su agenda no se reducirá exclusivamente a encuentros con mandatarios. En su incansable búsqueda de inversiones, Macri tiene pensado reunirse con el empresario Jack Ma, presidente del grupo Alibaba de negocios de internet. También con los responsables de la compañía Sany de volcadoras de cemento, de la empresa telefónica Huawei y de la China National Nuclear Corporation (CNNC), con la que fueron suscriptos acuerdos para la construcción de dos centrales nucleares.
Macri tiene en agenda reunirse con directivos de la firma Power China, la mayor compañía productora de electricidad de China; de Gezhouba, contratista de las dos centrales hidroeléctricas en el río Santa Cruz. Se trata de las represas Kirchner y Cepernic, que la administración Macri hizo rediseñar bajando la cantidad de turbinas.