Luego de los resultados electorales, la ex candidata por 1País dijo que “aprecia” a la gobernadora aunque se distanció de Cambiemos. Linares, referente del GEN, no descartó que “pudiera ser tentada” para cambiar de fuerza… una vez más.
Viernes 27 de octubre de 2017
En una entrevista a Radio Nacional le preguntaron a Margarita Stolbizer qué opinaba de los halagos por parte de Vidal y el ministro Salvai. No había pasado ni siquiera una semana de las elecciones del 22 de octubre, que arrojaron malos resultados para 1País, la coalición que integra junto a Sergio Massa.
La excandidata a senadora devolvió los elogios a la gobernadora bonaerense aunque aclaró que no está previsto un acercamiento a Cambiemos. “Hay mucho de especulación en el medio y poco de real en todas estas cosas”, afirmó.
Sin embargo, en Radio Telam, el senador nacional Jaime Linares -otro referente del GEN- planteó ayer que no le extrañaría que Stolbizer “pudiera ser tentada con algún ofrecimiento” del gobierno. En este sentido, recordó que Graciela Ocaña había sido funcionaria durante el kirchnerismo y hoy es parte del oficialismo. Además afirmó que el acuerdo con el tigrense tendrá “un debate amplio en función de los resultados electorales” del pasado domingo.
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No resultaría raro que Margarita cambie su piel una vez más. La camaleónica política se inició con la Juventud Radical; en el 2000 formó parte de la Alianza –defendiendo la Ley de Reforma Laboral y los superpoderes de Cavallo-; en 2007, junto a otros radicales, apoyó la candidatura presidencial de Elisa Carrió; seis años más tarde fue parte del rejunte electoral que dio lugar a FAUNEN (integrado por la Coalición Cívica ARI, Proyecto Sur, Libres del Sur, el Partido Socialista, el Partido Socialista Auténtico, la Unión Cívica Radical y el GEN); en 2015 Margarita se presentó como candidata por la alianza Progresistas (GEN, PS y Libres del Sur); ese mismo año hizo acuerdos provinciales con Cambiemos, por ejemplo en Jujuy. Un largo camino que hoy la muestra junto a Massa y Victoria Donda.
El “progresismo” que pretende ostentar, no existe más que en los nombres de algunas de las múltiples coaliciones que integró. Al igual que su “republicanismo”, es sólo una cortina de humo para terminar pactando con la derecha. Si su próxima movida es hacia Cambiemos, el tiempo y la rosca lo dirán.