En la mañana de hoy, en su programa de Cadena 3, el locutor ultramacrista comparo las medidas de la cuarentena con una dictadura militar. Repudio en redes sociales.
Viernes 4 de septiembre de 2020 15:04
Mario Pereyra, quien durante muchos años acaparo prácticamente el 80% de la audiencia radial en Córdoba a través de su programa Juntos volvió una vez más con su prédica a favor de los militares genocidas. Lo hizo esta mañana donde comparo algunas medidas que se están tomando para evitar el contagio de Covid-19 en algunas localidades. La comparación con una dictadura militar no tiene que ver con un cuidado de las libertades democráticas intensamente coartadas durante la pandemia, o una preocupación por la salud de los trabajadores que se contagian de a miles en los lugares de trabajo, si no con la intención de abrir las actividades en favor de los empresarios.
Pobrecito Pinochet. Honestidad brutal de parte del mismo tipo que le decía "mi querido general" al genocida Luciano Benjamín Menéndez. Escuchen su sincera congoja en este audio. Vaya nuestro más sincero repudio. Y asco. https://t.co/XqofkLZmM9
— Laura Vilches (@VilchesLaura) September 4, 2020
Su modelo de gestión de la pandemia es el de Bolsonaro o Trump. La última gran embestida a favor de los empresarios que tuvo, fue la semana pasada cuando señaló que deberían desarrollarse emprendimientos inmobiliarios en los montes quemados de las Sierras de Córdoba. Desde su micrófono de manera permanente salen mensajes anti sindicales o anti piqueteros y de defensa de la "libre empresa".
Mario Pereyra es gran amigo del ex presidente Mauricio Macri, quién incluso, siendo presidente, se dirigía a almorzar a la vivienda particular del locutor. Pereyra ha sido un gran impulsor de la difusión de la imagen de Macri en el interior del país.
Lejos de ser un exabrupto o una comparación desafortunada, recordemos que Mario Pereyra ha sido un opositor a la reapertura de los juicios a los genocidas y permanentemente minimizó los crímenes de la dictadura. En el año 1990 realizó uno de los reportajes más brutales desde 1983 a esta parte, cuando recibió a Luciano Benjamín Menendez, el principal genocida de la provincia, tratándolo de "Estimado General"
