Mark Zuckerberg parece seguir acumulando problemas y ahora Estados Unidos pide formalmente que el presidente ejecutivo de Facebook testifique por la divulgación de datos.
Viernes 23 de marzo de 2018 12:25
Mark Zuckerberg puede haber pensado que solucionaba el escándalo en el que está envuelto publicando un post es su red social, pero todo indica que va a tener que rendir cuentas en el mundo real.
El presidente ejecutivo de Facebook no deja de acumular malas noticias. Tras el reconocimiento de la filtración masiva de datos y los cuestionamientos de varios países de la Unión Europea, ahora Estados Unidos le pidió formalmente que testifique.
Los líderes de la Comisión de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes estadounidense escribieron este viernes a Zuckerberg, presidente ejecutivo de Facebook Inc, detallando nuevas preocupaciones sobre el uso de datos de la red social y le pidieron formalmente que testifique en una audiencia.
Las disculpas ofrecidas recientemente por Zuckerberg debido a los errores en el manejo de datos de 50 millones de usuarios no han logrado aliviar las preocupaciones de inversores y la molestia de legisladores, que creen que su respuesta no fue satisfactoria.
"La audiencia examinará la recolección y venta de información personal de más de 50 millones de usuarios de Facebook, potencialmente sin su notificación o consentimiento y en violación de la Política de Facebook", escribieron los legisladores Greg Walden y Frank Pallone, presidente republicano de la comisión y su líder demócrata, respectivamente.
El comunicado continúa: "Estamos deseando trabajar con Facebook y Zuckerberg para acordar una fecha y una hora en el futuro próximo para una audiencia ante el comité".
"La verdad es que estoy encantado (de testificar) si esto es lo correcto", contestó Zuckerberg en una entrevista con la cadena CNN.
El escándalo, destapado el pasado sábado por los diarios The New York Times y The Observer, ha castigado a Facebook en la bolsa y en lo que va de la semana ha perdido casi 50.000 millones de dólares y algunos de sus accionistas se ha querellado colectivamente contra la firma por cometer "actos ilegales" que les provocaron pérdidas bursátiles.
Zuckerberg ya había anunciado el pasado miércoles que la firma investigará a "todas las aplicaciones que accedieron a grandes cantidades de información" antes de 2014, cuando se les impuso limitaciones, y que ampliará sus restricciones a desarrolladores para evitar "abusos". Sin embargo los datos que se utilizaron en la filtración masiva fueron tomados en 2015. Esto sin contar que los datos personales de los usuarios son utilizados permanentemente por la red social para vender publicidad y que las configuraciones de seguridad son inentendibles para gran parte de los que la utilizan.
El caso ha generado preocupación a nivel mundial en relación a la protección de datos y su uso político y múltiples gobiernos, además de la Unión Europea (UE), han pedido explicaciones al empresario.