Luego de los hechos de violencia a principio del torneo Apertura 2013, las promesas de la tarjeta AFA plus y las cámaras de vigilancia en todos los estadios como soluciones, el fútbol Argentino sigue igual: sin visitantes, con hechos de violencia e “hinchas neutrales”.
Lunes 29 de septiembre de 2014 07:51
Luego de los hechos de violencia a principio del torneo Apertura 2013, las promesas de la tarjeta AFA plus y las cámaras de vigilancia en todos los estadios como soluciones, el fútbol Argentino sigue igual: sin visitantes, con hechos de violencia e “hinchas neutrales”.
En un año de idas, de vueltas, y de la muerte de Julio Grondona, la política del fútbol, fundamentalmente de la AFA y de los organismos de seguridad, no le han encontrado solución al problema de la violencia. Las promesas de la tarjeta AFA Plus y las cámaras en todos los estadios, como medidas de mayor seguridad, fueron tan efímeras como las promesas de disponer la vuelta a las canchas de los hinchas visitantes.
Como podemos apreciar, nada de esto ha ocurrido y la violencia sigue mas allá.
Unos días atrás tuvimos un herido de relativa gravedad en el Estadio Único de La Plata, en un clásico disputado entre Estudiantes y Gimnasia por la Copa Sudamericana.
La historia de la violencia en el fútbol y la suspensión de las hinchadas visitantes tienen varios puntos que mencionar y fundamentales actores.
Como primer punto de partida, debemos remontarnos al año 2007 en un partido de la promoción para ascender a primera. Tigre venció a Chicago en Mataderos, la barra de Chicago ingresó al campo de juego y se enfrentó con la barra de Tigre dejando un saldo de un muerto y una decena de heridos, entre ellos policías. Desde allí sorprendentemente no hubo más hinchas visitantes en la B Nacional, una contradicción ya que la promoción se consideran partidos de la categoría mayor, en este caso de primera (las hinchadas visitantes volverían en 2011 tras el descenso de River).
Pero lo que dio fin a las hinchadas visitantes en la primera división se remonta al año 2013 a causa de distintos hechos protagonizados por las barras y la policía.
Por un lado los enfrentamientos de la barra de Boca, de sus dos facciones por tomar el poder y ser dueños del negocio (a principio de 2013 en un amistoso en la Plata se enfrentaron a los tiros antes de entrar al estadio).
También en La Plata, en un partido entre Estudiantes y Lanús, donde la policía agredió a un hincha del “granate” causándole la muerte y los incidentes de la barra de Belgrano en Santa Fe con Colón y Newells que se dieron en ese año.
La solución fue la más sencilla: suspender a los hinchas visitantes.
Claro que muchos clubes están en contra de esta medida ya que les cambia las perspectivas, fundamentalmente la económica. De hecho, este año en Mendoza, se transgredió esta medida dándole potestad a un nuevo término, “hinchas neutrales”, en el partido de Godoy Cruz contra River en el Estadio Malvinas Argentinas.
Se les habilitó a los hinchas de River una cabecera y una parte de la platea, algo que debería ser sancionado por las autoridades de AFA (si la ley es justa, debe ser para todos).
Con estos hechos y decisiones el fútbol argentino sigue en decadencia, esperemos que se normalice, los hinchas visitantes puedan ir a la cancha y la seguridad los proteja, ya que las entradas están cada vez más caras y el fútbol no es el de primer nivel, pero ese es otro tema.
Lo cierto es que se extraña el “Uuuuh!!!” de la parcialidad visitante.