Se agranda la lista de motivos para salir a luchar junto a los docentes. El colegio ubicado en la Avenida Córdoba de la capital federal sufrió, a primeras horas de la mañana, la falta de reformas edilicias.
Lunes 20 de marzo de 2017 19:42
El reconocido colegio ubicado en la Av. Córdoba 1951 fue testigo de la falta de inversión en la educación pública.
A primeras horas de la mañana, un estudiante del nivel medio fue impactado por una ventana de su aula cuando intentó abrirla.
“Por suerte me pasó a mí y no a otro, si le pasaba a un pibe de primer grado no la contaba” comentaba Facundo Ferrase, el estudiante afectado por la caída de la ventana.
Casos como este demuestran el estado de emergencia por el cual está pasando la educación pública. Los docentes cobran miseria y las escuelas se caen a pedazos, venimos viendo esto desde hace ya varios años y ningún gobierno de turno destinó el presupuesto que la educación pública se merece. Los docentes de la provincia de Buenos Aires que padecieron y padecen el gobierno de Scioli y Vidal son testigo de ello.
Juntos pegamos más fuerte
La única manera de que esto cambie es que los estudiantes apoyemos la lucha de los docentes y nos organicemos pensando un plan de lucha reclamando por un salario y un ámbito de estudio y trabajo digno.
La Izquierda Diario recibió el testimonio de varios estudiantes del Normal Uno activistas del centro de estudiantes y de la agrupación No Vamo A Calmarno.
“El Estado no tiene interés por la educación, los que ocupan grandes cargos en el gobierno no se interesen por cómo puede estar el de “abajo” […] Las escuelas privadas están mejor que las escuelas públicas, cuando las cosas suben de precio los estudiantes de la escuela pública no pueden comprar materiales”. Melisa Vargas estudiante de 2do año y militante de No Vamo A Calmarno
“El Gobierno no subsidia a las escuelas públicas y subsidia a las privadas”. Ariadna Pesce
“El Gobierno no se pone las pilas para arreglar nada”. Annie Lee, militante No Vamo A Calmarno
“Tenemos que tomar una medida para marcarle el territorio a las autoridades”. Fran Levington, activista del Centro de estudiantes