Unos 180.000 abonados están sin luz en la costa de Florida, Estados Unidos, ante la proximidad del huracán Matthew.
Viernes 7 de octubre de 2016
Luego de su paso por Bahamas, la población de la región sureste de Estados Unidos es la que ahora se prepara para recibir al Huracán Matthew en el marco de una campaña centrada en la autoevacuación de las zonas de riesgo.
Matthew se ha transformado en un huracán "extremadamente peligroso" de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson y es posible que continúe así mientras se acerca a Estados Unidos, donde podría golpear sobre Florida o avanzar por la costa hacia la noche del viernes.
El CNH advirtió que su paso podría tener consecuencias "potencialmente desastrosas" y amplió su área de alerta desde el sur de Florida hasta Carolina del Sur pasando por Georgia. Más de 12 millones de residentes estaban bajo vigilancia por el huracán, según Weather Channel.
El último gran huracán en impactar al país norteamericano con vientos máximos sostenidos de 177 kilómetros por hora fue Wilma en 2005.
Las carreteras de Florida, Georgia y Carolina del Norte y del Sur estaban congestionadas y los suministros escaseaban en las gasolineras y tiendas de alimentos antes de la llegada del huracán.
Cientos de vuelos de pasajeros fueron cancelados en Florida, incluyendo servicios de American Airlines, Delta Airlines y United Airlines.
El presidente Barack Obama declaró estado de emergencia en Florida y en Carolina del Sur, una decisión que autoriza la coordinación de agencias federales.
El gobernador de Florida, Rick Scott, activó a varios miles de efectivos de la Guardia Nacional y advirtió que es probable que millones de personas se queden sin electricidad. En Florida se espera una subida del nivel del mar de hasta 2,7 metros.
Scott instó a unas 1,5 millones de personas del estado a estar atentos a las órdenes de evacuación. Los refugios en Florida, Georgia y Carolina del Sur estaban abiertos para los evacuados.