El BBVA Research en su informe predice un crecimiento del 2,7% para 2015, tasa que también augura para 2016, corrigiendo sus previsiones de crecimiento del 1% de un año atrás. En el caso de Comisión Europea acaba de revisar al alza sus pronósticos con un crecimiento del 2,3% para este año.
Viernes 13 de febrero de 2015
En ambos informes se considera que la recuperación de la economía del país ibérico luego de sufrir seis años de recesión obedece a factores externos e internos. La baja pronunciada de más del 40% del precio del petróleo y la devaluación de 20 puntos del euro respecto al dólar ha agilizado sus exportaciones debido a la alta dependencia energética y la orientación exportadora de la economía del Estado Español. Los analistas señalan que esto podría aportar entre un punto y un punto y medio de aumento al PBI. Aunque la dinámica de bajo crecimiento de Europa (principal destino de sus ventas) pone paños fríos a que esta posibilidad de mejorar su competitividad tenga más fuerza.
En el plano interior los informes destacan mejoras en la industria, en la construcción y en los servicios. Pero también por el lado del consumo y la inversión hubo mejoras en la concesión de nuevos créditos a familias y empresas (en operaciones por debajo del millón de euros), un síntoma que puede responder al saneamiento de los bancos y las expectativas de una mayor intervención del BCE con su nuevo plan de estímulo monetario.
Un dato alentador también lo aporta cierta mejora en la evolución de las cuentas públicas. BBVA Research sostiene que el aumento de los ingresos por impuestos y la contención en los gastos asociados a la crisis (desempleo, pago de intereses) permitirá alcanzar las metas de déficit propuestas (4,2% del PIB este año, 2,8% el próximo. No obstante, Bruselas tiene un pronóstico diferente. Bruselas considera que España, tras haber cerrado 2014 dentro de lo previsto, incumplirá sus metas de déficit, con un saldo fiscal negativo del 4,5 % del PIB (el compromiso es el 4,2 %) este año y del 3,7 % en 2016 (frente al 2,8 % exigido): la Comisión ve riesgos por ese flanco por la reforma tributaria prometida por el Gobierno de Rajoy y, sobre todo, porque 2015 es año electoral.
El empleo y el salario en la mira
Si bien estaríamos frente a un cambio de signo en el rumbo de la economía del Estado Español esta parte también de un nivel muy elevado de desempleo. Y esta situación no sería modificada sustancialmente por el crecimiento que se pronostica. La tasa de paro bajará al 22,5 % este año y al 20,5 % el próximo, cifras que duplican el promedio de desempleo de la UE que se ubica en el 11%. Y en el caso de los menores de 25 años el desempleo es de más del 50%. Esta terrible situación de los trabajadores tuvo sus consecuencias sobre el salario. Tras cuatro años consecutivos de rebaja de los costes laborales unitarios: algo que, en plata, viene a ser uno de los mayores recortes salariales en Europa.
Según el BBVA la remuneración por asalariado, una aproximación al salario medio, retrocedería de forma significativa (un 0,9%) este año. Y analistas afirman que es posible que suba el sueldo de los que ya tienen trabajo, y que el sueldo medio baje, por la incorporación al empleo de personas que estaban en paro, sobre todo si esa incorporación es tan importante como la que anticipamos. O sea, los que no perdieron el trabajo ganan igual, y los que lo perdieron o se incorporan por primera vez al mercado laboral, lo harán con salarios menores a los primeros. A esto se suma las leyes laborales impulsadas por el gobierno con las cuales se flexibilizaron las formas de contratación y despidos.
De esta manera, el retroceso en los salarios como las modalidades de contratación más flexibles, se encuentran entre los pilares de la actual recuperación (aunque no en los informes no lo digan). Este es un fenómeno propio del capitalismo por el cual las crisis que los capitalistas generan se transforman en oportunidades para mejorar las condiciones de explotación y extracción de plusvalía (ganancias) de la fuerza de trabajo. Lo que ellos denominan mejoras en la productividad (producir igual o más con menores costos).
Por último, la recuperación de España como de Grecia (La CE prevé que Grecia crezca este año un 2,5% y el próximo, un 3,6%.) unas de las economías más golpeadas por la crisis, ocurre dentro de un panorama europeo donde predominan las tendencias al bajo crecimiento y a la deflación (baja generalizada de precios). Y en este contexto hay desigualdades en la dinámica de crecimiento entre los países, Alemania (1-1,5), Italia (arrastra casi tres años de recesión), Francia (1,5), etc. que hacen que la situación de conjunto sea más compleja debido a la fuerte interdependencia de las economías de la UE.