Armando Enriquez trabajaba en una planta de tratamientos de líquidos cloacales en Santa Rosa y murió este martes por aspirar gases tóxicos. Otros dos trabajadores que trataron de socorrer a Enriquez se encuentran internados.
Miércoles 20 de septiembre de 2017 14:09
Este martes por la noche, murió Armando Enriquez, de 26 años, cuando trabajaba en una planta de tratamientos de líquidos cloacales en el departamento de Santa Rosa que el gobernador Alfredo Cornejo iba a inaugurar hoy.
Según informaron desde la intendencia, Enriquez falleció al inhalar gases tóxicos provenientes de la ruptura de un caño, cuando descendió al sistema cloacal a tratar de destapar el caño roto.
Armando Enriquez trabajaba en la empresa Lauggero, quien tiene a cargo la construcción de la planta cloacal en la Villa Cabecera del departamento del este provincial. Su hermano, que también trabajaba en la obra, al ver que Armando no contestaba los llamados, ingresó junto a otro compañero al sistema cloacal pero lo encontraron ya sin vida dentro del sistema de cañerías. Ambos debieron ser hospitalzados por principio de asfixia e inhalación de gases tóxicos.
La obra iba a ser inaugurada este miércoles por el gobernador Cornejo, quien suspendió la visita debido a la muerte de Enriquez.
Mientras el gobernador Cornejo hablan de la "industria" de los juicios laborales, las condiciones de precariedad laboral y la desidia patronal se siguen cobrando vidas obreras en la provincia de Mendoza y el país. En lo que va del año, en Mendoza murieron Gualberto Chaira, de 40 años, quien cayó del techo donde estaba trabajando en una fábrica productora de vinagres en Dorrego, departamento de Guaymallén; Sergio Garro, fallecido tras caer dentro de un tanque en la bodega donde trabajaba; Carlos Kabaldian, de 19 años, también en una fábrica en Guaymalén; Rodrigo Pérez, de 28 años, quien murió al caer del techo que estaba reparando en una escuela de San Martin; Juan Dotani, un albañil de 75 años murió en una obra en construcción en Maipú y Julio Obiedo, de 42 años, quien murió al caer en la boca de un pozo petrolero en el sur provincial.