La familia ha denunciado a un miembro de la Unidad de Apoyo Policial Operativo (UAPO) que agredió a su hijo en una concentración contra la violencia policial.
Nadia Celaya Zaragoza
Martes 31 de mayo de 2016
Ocurrió el 23 de Mayo mientras repartía unas octavillas en la Plaza del Pilar, en las que se exigía justicia para su tío Miguel Ángel, el joven que fue encontrado muerto el mes pasado en el calabozo de la comisaria del Actur de la Policía Nacional de Zaragoza.
Según la versión oficial se debió a causas naturales, un edema pulmonar agudo, pero para la familia y algunos colectivos de la ciudad esta versión carece de credibilidad. No es para menos teniendo en cuenta que fue golpeado durante su detención y posteriormente en los calabozos, que se le trasladó a varios centros hospitalarios sin saber las causas ni el tratamiento recibido y volvió a la celda que compartía con tres personas.
La policía tardó más de seis horas en descubrir que el joven había fallecido a pesar de las alertas que sus compañeros de celda habían dado a los agentes. Por todo esto, la familia presentó una denuncia con el apoyo de la Asociación Libre de Abogados de Zaragoza (ALAZ) que acudirá como acusación popular.
El colectivo Derechos Civiles 15M Zaragoza que está siguiendo el caso, dice que podría tratarse de un caso de abuso policial y que como mínimo “ha existido dejadez y abandono por parte de la Policía Nacional de la Comisaría, en su obligación de responsabilizarse de la salud de las personas detenidas y que están bajo su cuidado”.
Este colectivo junto a la familia decidió denunciar públicamente el caso frente a la información dada por la policía y los medios de comunicación que se empeñan en dar la noticia con el historial delictivo del fallecido.
Para ello llevan convocadas dos concentraciones con el lema “contra la violencia policial. Ni olvido ni perdón”. La del pasado lunes se realizó frente a la Delegación del Gobierno e irónicamente la policía volvió a actuar con violencia. Esta vez fue la UAPO, el cuerpo antidisturbios de la Policía Local de Zaragoza, que retorció el brazo al sobrino del fallecido causándole una contusión.
Esta unidad policial es conocida por reprimir y acosar a la juventud en sus lugares de ocio, por sus múltiples abusos y agresiones racistas contra los inmigrantes y también por actuar en ocasiones contra manifestantes y activistas. Desde su creación en 2007 son numerosos los casos de brutalidad que han realizado y la exclamación “por la disolución de la UAPO” está muy extendida desde hace tiempo entre la juventud y los movimientos de izquierda.