El sábado 20 fuimos desde Ramos Mejía un grupo de compañeros a conocer esta experiencia de control obrero. Y también su juegoteca. Aquí les dejo un relato de la experiencia vivida, para compartir con ustedes.
Lunes 22 de agosto de 2016 17:58
Este sábado estuvimos en MadyGraf acompañando a las y los compañeros en su lucha a dos años de control obrero. De primera mano escuchamos los relatos de las compañeras desbordantes de entusiasmo, la fuerza se trasmitía con cada palabra.
Una historia que comienza mucho antes del conflicto y en el caso de las mujeres empieza desde afuera de la fábrica, movilizándose con sus hijos a la casa del patrón o pasando frío en el acampe o temiendo el tránsito con los nenes jugando en la vereda angosta. Hoy trabajan junto a sus compañeros y planean el crecimiento de su juegoteca a dos turnos todos los días de la semana. Saben que la lucha continúa dentro y fuera de la fábrica. Que son un ejemplo y un estímulo para muchos en un mundo que no tiene las reglas de la asamblea.
Fui con mis dos nenes. Simón de 8 años y Enara de 5. El día pasó sin que nos diéramos cuenta: los cuentos musicales y los juegos, el intercambio de experiencias y las bandas. Sobre el mismo suelo que los vio y los sigue viendo luchar.
Pero para mí está historia se encadena de alguna forma con experiencias propias: desde que tengo memoria fui sensible frente a las diversas situaciones de desigualdad y por lo general tenía algo para decir o hacer al respecto.
Fui creciendo y buscando dónde referenciarme y donde sumarme, centro de estudiantes, agrupaciones juveniles y toda mi vida tensionando en la idea de ser sujeto protagonista de la historia. Mi trabajo en la docencia, mi condición de mujer, todo... Me acerqué al PTS para las elecciones presidenciales. Hicimos malabares con mi compañero para cuidar de los niños y fiscalizar ese día. Las propuestas y los acontecimientos se fueron sucediendo y hoy soy parte del equipo de compañeros de Ramos mejía.
La inauguración de nuestro local fue en abril con Nico y el Chipi. Desde ese día entendí que la juegoteca era el elemento material para organizar a las compañeras y compañeros que tenemos hijos. Militamos con ellos y en esa acción descubrimos que otros se sienten incluidos y que el cuidado de los más pequeños es también algo colectivo.
Así que además de conocer el control obrero en MadyGraf, tenía interés en la novedosa experiencia que están haciendo con el cuidado de nuestros hijos. Además de mis hijos, la visita la hicimos con Facu, que es profe de música de la escuela donde trabajo, y con Moni, que es mamá del mismo jardín que mi hija.
Voces de la jornada
Facundo: Soy docente de música. La experiencia de conocer MadyGraf bajo control obrero fue muy interesante. Fui con mi hijo y la pasamos muy bien, en el festival y con los juegos que había. Queríamos conocer la fábrica y la juegoteca pero ese día estaba cerrada. Así que ya quedamos que vamos a volver otro día. Después, hablando con una de las trabajadoras que se encarga de la juegoteca me contaba que tienen más de 60 chicos y que además de juegos hacen otras actividades. Que les faltaba música. Así que pese a los horarios y la distancia, me ofrecí para colaborar. Aunque sea capacitando para que ellas después lo incorporen. Desde lo que uno pueda, sería muy lindo poder ayudar a que esto avance.
Mónica: Muy linda experiencia compartir los testimonios de los trabajadores en su lucha! muy movilizante y emocionante. Todos en poco o mucho contribuían con esta severa lucha! Le quería dar las gracias a la trabajadora q nos transmitió algunas vivencias de lucha diaria en su camino a la victoria y por conservar lo logrado!!!
En fin: MadyGraf es por muchas razones una fuerte expresión de nuestras luchas. ¡cómo no estar a dos años del control obrero fundidos en un abrazo fraternal con ellos!