La Izquierda Diario dialogó con Bettina Baquela, trabajadora de la Agencia Nacional de Discapacidad en la provincia de Jujuy, delegada normalizadora del Centro de Referencia Jujuy, quien nos comentó sobre la situación que se vive en la repartición tras los despidos y vaciamiento en la institución.
Lunes 23 de abril de 2018
LID: ¿Cómo se expresaron las políticas de ajuste en la dirección de Pensiones?
BB: El primer intento de ajuste sobre las pensiones no contributivas fue la baja de 170.000 beneficiarios durante el 2017 en todo el país, que debido a la gran difusión y acciones que se hicieron, impactó de manera negativa en la mayoría de la sociedad y el gobierno tuvo que dar marcha atrás con la mayoría de los casos. En ese momento se escucharon comentarios de funcionarios nacionales que decían que "las personas con discapacidad podían trabajar" y que por eso no necesitaban una pensión. A partir de ese momento el gobierno cambió de táctica, comenzando a detener los trámites en curso en las últimas instancias del mismo. Es así que hasta el día de hoy hay 100.000 pensiones por discapacidad, unas 5.000 en Jujuy, a la espera de una firma para que se puedan otorgar. Esto por una decisión deliberada.
La segunda etapa de ajuste se vivió en octubre del año pasado con la disolución de la Comisión Nacional de Pensiones no contributivas y la creación de la Agencia Nacional de Discapacidad - por decreto presidencial, que aglutina a partir de ese momento a la Comisión Nacional de Discapacidad - CONADI, el Servicio Nacional de Rehabilitación y el Programa Incluir Salud. La tercera fase de ataques comenzó el pasado 16 de abril con los primeros despidos en la agencia. 67 compañeros fueron despedidos en todo el país de manera ilegal y arbitraria de sus puestos de trabajo con el aval de la policía, que en sintonia de lo que viene sucediendo desde comienzos del 2016 con otros despidos en el ámbito estatal, efectivos policiales se ubicaron en en la puerta de la repartición e impedían el ingreso de quienes figuraban en una lista. A esa lista tuvimos acceso por un compañero de trabajo en Capital Federal que logró sacarle una foto. Así nos enteramos que cuatro compañeros de Jujuy figuraban en la misma y estaban siendo despedidos.
En total son 40 los trabajadores de pensiones despedidos en todo el país, un 10 % de los mismos son de Jujuy, todos con 12 a 18 años de antigüedad, todos comprometidos con una tarea que los lleva a contactar con un sector de la población de los más vulnerables de la sociedad como son los discapacitados y pobres.
LID: ¿Qué medidas están llevando adelante los trabajadores?
BB: Nos organizamos de manera inmediata en todo el país, en provincias donde hay despidos y en las que no también, y se realizaron asambleas. Como los trabajadores de Pensiones trabajamos en los Centros de Referencia, se sumaron trabajadores de otros programas del Ministerio de Desarrollo Social como Primeros Años, Sennaf y Abordaje territorial.
Desde ese momento hemos llevado adelante diversas medidas como paro activo con atención al público, paro con asistencia y conscientización, asambleas permanentes, entre otras medidas.
LID: Algo más que quieras remarcar.
BB: Somos conscientes que este ataque recién empieza y que hay una combinación entre despidos y vaciamiento de la repartición para que deje de ser una política pública las pensiones no contributivas. Sabemos también que el ataque supera al sector, como sucede en el Hospital Posadas, en el INTI, SENASA, SAF, etc.
La única fuerza que tenemos para hacer frente a este desguace es la unidad de todos los trabajadores, perder el miedo, realizar medidas de fuerza, visibilizar la situación, involucrar a todos. Estamos comprometidos con la defensa de nuestros derechos y de garantizar también estos derechos a quienes lo necesitan.
Con los compañeros del Centro de Referencia en Jujuy, vamos a continuar con las medidas. Es de importancia estar unidos más que nunca.Teniendo en cuenta la situación de Senasa, SAF y otras reparticiones, desde nuestra asamblea se definió convocar a una asamblea general de trabajadores de los organismos nacionales, donde participen trabajadores afiliados de los distintos sindicatos como ATE, UPCN, o los que no están afiliados, y donde los sindicatos estén presentes y puedan estar a la altura de la grave situación que se vive hasta el momento.