Municipales de planta permanente de Zapala recibieron una actualización insuficiente de sueldo. Los monotributistas son olvidados por el Gobierno y los sindicatos.
Viernes 27 de noviembre de 2020 11:38
La semana anterior compañeros y compañeras de la planta permanente de la municipalidad de Zapala recibimos una actualización de bolsillo de alrededor del 10 % (entre refrigerio y remuneración no bonificable), que las conducciones sindicales osan en llamarle aumento, cuando las consultoras marcan una inflación del 35,8 % para este año.
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El 10 de diciembre habría una nueva mesa de negociación. Esta actualización es la primera desde iniciada la cuarentena. Mientras que trabajadores precarios (monotributistas) ni siquiera fueron incluídes en la mesa, quienes meses atrás padecieron un recorte salarial en el marco de la pandemia. Se acentúa la miseria y a las conducciones sindicales parece importarle poco las urgencias que nos atraviesan.
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El coronavirus, la recesión y crisis social generalizada se usa de excusa para hablar de que la municipalidad no recibe los fondos suficientes como para sostener los salarios, ese es el relato gubernamental. A los sindicatos que supuestamente deben defender nuestros derechos ello parece convencerlos, negociando como de costumbre a la baja; desconociendo que a las petroleras el Estado las subsidió durante la pandemia, mientras que las patronales rebajaron sueldos y para el año que vienen ya tienen asegurada su tajada a través del presupuesto de ajuste a medida del FMI que va a parar a los empresarios del fracking, como el multimillonario Paolo Rocca, quien ha despedido y suspendido a decenas de miles siendo totalmente impune al decreto antidespidos de Fernández en el marco de la cuarentena.
Las conducciones sindicales deben dejar de dividir entre trabajadores de primera y tercera mano. Las cuatro conducciones sindicales tienen que convocar a Asamblea General de todos los sectores para discutir una salida de conjunto ante tanto retroceso.