El Círculo Rojo. Milei y Cicerón: citas falsas y obsesiones

· El domingo a la noche, el presidente Javier Milei presentó el presupuesto 2025 y citó al cónsul romano Marco Tulio Cicerón:

“El presupuesto debe equilibrarse, el tesoro debe ser reaprovisionado, la deuda pública debe ser disminuida, la arrogancia de los funcionarios públicos debe ser moderada y controlada y la ayuda a otros países debe eliminarse, para que Roma no vaya a la bancarrota. La gente debe nuevamente aprender a trabajar, en lugar de vivir a costa del Estado”.

· La cita no es real, pero ¿de dónde salió? De la novela histórica La cortina de hierro de Taylor Caldwell, escrita en 1965.

· Milei no fue el primero en caer. Es un error bastante común entre conservadores y referentes de derecha que la usan para justificar recortes y ajuste fiscal.

· Esta no es la primera vez que Milei utiliza una imagen del pasado. Ya lo hizo cuando citó a Dante Alighieri: “Los lugares más calientes del infierno están reservados para aquellos que en tiempos de crisis moral se mantienen neutrales”. Aunque era una cita de otra novela de ficción, El Código Da Vinci de Dan Brown.

¿Por qué la obsesión con el mundo antiguo?

· En muchas narrativas de derecha, la mirada al pasado funciona en dos niveles.

· En la vida cotidiana: orden y biología, familia, tradición versus la famosa “ideología de género”. Un ejemplo de estas imágenes se vieron en las declaraciones del legislador libertariano Agustín Romo sobre el desfile del 9 de julio: “Qué lindo ver un acto patrio con bandas militares… Dejamos atrás los desfiles de travestis comunistas y faloperos”.

· En la política: mitos originarios (en el caso de Argentina: la imagen de 1916 y la independencia, el escenario elegido para el Pacto de Mayo, la iconografía patria y las tipografías antiguas, que volvieron a usar para el asado de los “87 héroes”).

· A esto se suma algo descrito como “heroificación de los líderes”. El politólogo Mario Riorda (especialista en comunicación política) señala que los líderes se presentan hoy como “superhéroes que van a salvar a su pueblo, pero sin consultarlo, sin quererlo, sin mirarlo; ellos no tienen tiempo para la gente, que quien quiera los siga porque su misión es salvar el mundo”.

Mi imperio romano

· En los relatos de decadencia y resurgimiento, el imperio romano tiene una presencia muy fuerte.

· A fines de 2023 una tendencia en redes sociales evidenció el magnetismo del imperio romano entre hombres y un portal consultó a Mary Beard, una especialista inglesa en la Antigua Roma.

· Dijo dos cosas muy interesantes:

· Lo más visible: “un sentido de poder, de conquista, dentro de un marco enteramente masculino que resuena con ese tipo de machismo que estamos viendo hoy en día”.

· Pero además: los romanos “debatían constantemente la naturaleza de la masculinidad, la división entre los géneros, se preguntaban qué es ser un buen hombre”.

· Esto inspira a muchos varones (sobre todo entre quienes tienen visiones más o menos conservadoras).

· ¿Hay un sesgo de género? Sí, porque las mujeres no estamos en esa historia. No es un problema moral o historiográfico, las mujeres eran esclavas, la ciudadanía era masculina y las riquezas e ideas de esa sociedad eran hechas por y para los varones.

· La investigadora Donna Zuckerberg (hermana de Mark) investigó el interés de varones, sobre todo los que participan de la manósfera (foros misóginos, reddit), en el imperio romano y sus ideas. Dice: “Buscan en el mundo antiguo la confirmación de su punto de vista preexistente sobre el mundo”. Un mundo en el que, como dice Mary Beard, el poder es 100% masculino.

· Estas filosofías funcionan como autoayuda masculina, explican de alguna forma el “sufrimiento” del “hombre blanco heterosexual” se siente orimido por la corrección política, el feminismo y esta vida que considera “sin valores”.

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· El mundo antiguo y el pasado en general ofrecen un lugar adonde volver desde la experiencia frustrante en el neoliberalismo, que las derechas identifican interesadamente con el feminismo, el movimiento LGBT y todo lo que consideran que está “destruyendo” Occidente (como dijo el presidente en el foro de Davos). De eso se tratan la reacción patriarcal, las refundaciones conservadoras (estamos hablando de lo simbólico, esto obviamente tiene un correlato material, que es otro tema).

· Es imposible volver el tiempo atrás, solo hablan del pasado porque sirve para justificar políticas reaccionarias y porque no tienen nada que ofrecer para el futuro, ni siquiera promesas.