Un triunfo parcial del Gobierno alcanzado con los métodos clásicos de la casta. Editorial de “El Círculo Rojo”, programa de La Izquierda Diario que ese emite los jueves de 22 a 24 h por Radio Con Vos, 89.9.
La casta fue al rescate de Milei y Milei se recibió de casta. Es una síntesis posible de la larga jornada que terminó en la aprobación de la Ley Bases y el Paquete Fiscal en el Senado, junto con el rechazo de algunos apartados.
Fue un triunfo político parcial del Gobierno logrado a un alto costo y que no necesariamente resuelve los problemas más acuciantes que lo siguen acechando.
La nueva normativa (con todas las limitaciones que encontró) es una avanzada contra los trabajadores, las trabajadoras y las mayorías populares y atenta contra la soberanía nacional y es, básicamente, una ley para los más ricos.
¿Por qué? Bueno porque los senadores y senadoras revalidaron una reforma laboral que legaliza la precarización del empleo, facilita la informalidad y, en general, liquida conquistas o derechos que venían muy dañados, pero estaban vigentes; porque votaron a favor de un ataque a los empleados públicos y para permitir privatizaciones que, más allá de se excluyeron muchas empresas (las últimas en sacarse de la lista fueron Aerolíneas, el Correo y los medios públicos), quedaron otras importantes como ferrocarriles y Aysa; porque aprobaron una reforma tributaria absolutamente regresiva; porque dieron su voto a favor del Régimen de Inventivo a las Grandes Inversiones (con retoques también, pero parciales) que favorece una economía de “enclave” con fuerte sesgo extractivista, descomunales e inéditos beneficios para multinacionales; y porque aprobaron la delegación de facultades para un tipo que se cree una mezcla de Moisés y Terminator.
La aprobación de la Ley Bases y el Paquete Fiscal tuvo lugar cuando el Gobierno venía de atravesar sus dos peores semanas con la salida abrupta de Nicolás Posse de la JGM; las mil internas que lo cruzan (cerca de 50 funcionarios renunciados o echados en estos meses); la inquietud de “los mercados” por la encerrona en la que está el esquema económico y, bueno, el escándalo por el secuestro de toneladas alimentos destinadas a comedores populares que tuvo como protagonista a Sandra Petovello (y que cayó muy mal en la opinión pública. Encuesta de Zuban-Córdoba).
El festejo de “los mercados” hoy (con subida de bonos y acciones, y baja del riesgo país) demuestra que se consideran ganadores porque, efectivamente, esta normativa los favorece.
Fueron malas semanas, pese a que venía mostrando un “éxito” con el descenso de inflación (que hoy se confirmó con un alza mensual de 4.2 % en mayo), pero a costa romper la economía con una recesión brutal.
Ahora, si todo esto es así, no es menos cierto que Milei y el Gobierno entregaron mucho más de lo que pretendían, debido a su debilidad política y a la encerrona de su hoja de ruta económica. Para evitar un desguace de la Ley Bases, una derrota en la votación general o votaciones adversas en los capítulos en particular, cedió y aceptó cambios medulares (bajar Aerolíneas Argentinas o el Correo del plan de privatizaciones, por ejemplo) o eliminar directamente todo el capítulo previsional y retrocedió también en quitar la moratoria para aquellos y, sobre todo aquellas, que no tenían los aportes suficientes.
Hay que recordar que el borrador original, el presentado en enero, contemplaba más de 600 artículos y quedó reducido a casi una tercera parte. Es decir, desde los propios objetivos que se puso el Gobierno al grito de “no voy a negociar con nadie”, aprobó una ley bastante diezmada, con resultados muy ajustados (un empate general y en varios apartados) y negociando con todos y todas.
No sólo eso, negoció la aprobación desesperada de la ley con métodos que no son sólo de la política tradicional (“la casta”), sino lo peor de esos métodos. Con Lucila Crexell, la senadora por Neuquén tranzó a cielo abierto la embajada en la Unesco a la que fue nombrada mientras se desarrollaba la votación; con el gobierno de Entre Ríos negoció que pueda nombrar a los tres miembros de la comisión binacional que administra la represa de Salto Grande en el río Uruguay ¿Para qué? Para que el peronista Edgardo Kueider se sumara a los otros dos representantes de Entre Ríos y votara a favor.
¿Se entiende? Cargos por votos, votos por plata y todo en vivo y en directo casi por cadena nacional.Milei metió las dos manos en la mierda de la política tradicional, se enchastró hasta el cuello para, con la lengua afuera, aprobar una ley bastante mutilada. Porque digamos la verdad, el “logro” fue haber evitado un escenario de catástrofe si la ley se caía, más que haber sentado las bases para solucionar los problemas que lo siguen acechando.
Incluso con todo esto, no pudo evitar que los capítulos de Ganancias y Bienes Personales fueran rechazados en la votación del Paquete Fiscal y ahora tienen que volver a Diputados junto a otras modificaciones. Para evitar una derrota había sacado “voluntariamente” el apartado previsional (con el que quería seguir ahorrando mediante la degradación de millones de jubiladas que tenían que pasar a otro régimen), Ganancias y Bienes Personales están en riesgo (con los que pensaba seguir recaudando), sumado a que Diputados ya votó una nueva fórmula jubilatoria que le aumenta el gasto. Hoy hablaba con un economista muy consultado y le preguntaba: ¿Triunfo agónico, pero triunfo al fin del Gobierno? Y me contestó: “Sin toda la parte impositiva todo esto es un castillo de naipes”.
¿Por qué? Porque Milei a esta altura, quería tener mucho más reducido el gasto público y se iba quedando sin nafta para continuar el ajuste (por eso pospuso el aumento de tarifas todo lo que pudo) y además, tuvo que resignar mucho de recaudación, siendo que estamos a mitad de año y se perdió todo este tiempo (la ley la presentó en enero).
Mirando este escenario se puede entender lo que pasó en la calle ¿Y qué pasó en la calle? Una movilización muy importante (aunque la mayoría de los medios no la mostraban en toda su dimensión) y un show de policías y servicios montado por Patricia Bullrich para evitar mediante una represión provocada que esa concentración alcance un punto culminante cuando se acercaba la hora en la que eso podía suceder. Un circo que continuó con el comunicado de la Oficina de la Presidencia que habla de “terrorismo” y “golpe de Estado” y sigue en la justicia con las acusaciones insostenibles contra los detenidos.
Párrafo aparte, merecen los dirigentes sindicales y la CGT (entre los que están los que retiraron a su gente temprano y los que no fueron o no hicieron todo lo posible). Porque, a ver, se puso el ojo en Martín Lousteau que dio el quorum, en Crexell bailando por un cargo, en José Carambia y Natalia Gadano, los senadores de Santa Cruz que votaron en general en contra (con eso se alcanzó el empate), y se fueron de la votación en particular y está bien, son responsables. Pero —y acá tomo algo que le escuché al periodista Rolando Graña, que no es ningún izquierdista—¿qué le impedía o a los sindicatos poner 300 mil, 400 mil personas en la calle para que la marcha sea más contundente y seguramente la represión menos efectiva? Nada lo impedía, no solo eso, sino hacer un paro nacional y una deliberación en todos los lugares de trabajo para concientizar y lograr mayor adhesión. Nada lo impedía, salvo que quieren negociar ellos “la suya”. De esa manera, hicieron también su aporte porque fue tan agónico el triunfo del Gobierno que algo más de decisión lo llevaba a la derrota.
Parecería que el salomónico “principio de revelación” del que tanto habla Milei (vieron que si tiene votaciones adversas dice que igual son un triunfo porque revela lo que es la casta etc.), bueno, por estas horas operó para revelar a la casta que salvó a Milei, a Milei que para ser salvado tranzó y repartió beneficios para la casta, para un lograr un “triunfo” que le evitó el naufragio, lo dejó frente a los mismos problemas que tenía ayer.
Periodista. Editor y columnista político en La Izquierda Diario. Colabora en revistas y publicaciones nacionales con artículos sobre la realidad política y social. Conduce el programa radial “El Círculo Rojo” que se emite todos los jueves de 22 a 24 hs. por Radio Con Vos 89.9.