Las prioridades del gobierno de Trump y el de Peña son la frontera, la migración y la seguridad, es decir, profundizar la militarización para garantizar el saqueo.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Jueves 6 de julio de 2017 01:18
Entre los temas abordados por el titular de la secretaría de Relaciones Exteriores se contaron proyectos de infraestructura fronteriza, un dato que no es menor ya que da cuenta del interés de la administración Trump por desarrollar la cadena de valor instalada en la frontera entre México y Estados Unidos.
De acuerdo con un comunicado de la secretaría “El secretario Videgaray reiteró la importancia de la frontera como una zona de competitividad y desarrollo compartido. En este sentido, se comentaron diversos proyectos de infraestructura fronteriza para facilitar el flujo eficiente, seguro y ordenado de personas y bienes”.
Destacó también que ambos secretarios estudiaron los principales objetivos de México y Estados Unidos en materia de frontera, migración y seguridad, y subrayaron la necesidad de planear conjuntamente para enfrentar retos regionales, así como profundizar esfuerzos a favor del desarrollo de Centroamérica.
Mientras la administración Trump endurece la ofensiva contra los migrantes en EE.UU. con leyes que los criminalizan, el canciller mexicano reivindicó la “coordinación que se ha dado en materia migratoria y reiteró la necesidad de respetar el debido proceso y los derechos de los mexicanos en Estados Unidos”.
Asimismo, en el comunicado mencionado el gobierno afirma que en la reunión “se enfatizó la importancia de que las autoridades de ambos países continúen trabajando juntas para combatir al crimen organizado trasnacional”.
Cinismo puro: el ex presidente George W. Bush por años protegió al ex gobernador de Tamaulipas Tomás Yarrington, hoy detenido por vínculos con el crimen organizado. Lo que el gobierno servil de Peña Nieto llama “combate al crimen organizado” es en realidad la militarización de México y Centroamérica financiada con los fondos de la Iniciativa Mérida, para garantizar el saqueo de los recursos de la región y sofocar la protesta social.
Esta reunión es la antesala del encuentro entre Trump y Peña Nieto que se realizará en Alemania en el marco de la reunión del G20 y también del inicio de la renegociación del TLCAN que tendrá lugar a inicios de agosto.