El diputado del partido Activar, aliado a La Libertad Avanza, está prófugo desde que se dictó su pedido de captura tras hallarse en su domicilio gran cantidad de archivos MASI (Material de Abuso Sexual Infantil). Otro caso que demuestra las relaciones del poder con delitos contra las infancias.
Lunes 26 de agosto 10:37
Misiones es escenario de otro escándalo que tiene como víctima a las infancias, cuando todavía estamos ante la búsqueda desesperada de Loan.
Se trata del caso de dos hermanos ligados al poder político. Sebastián y Germán Kiczka.
Germán Kiczka es apoderado del Partido Activar y diputado provincial. La fuerza es liderada por Pedro Puerta (hijo del ex gobernador y presidente Ramón Puerta) y había logrado dos lugares en la Legislatura misionera y uno en el Congreso acompañando a Juntos por el Cambio. Pero a poco de asumir Javier Milei, Activar se reacomodó dentro del espacio libertario.
La investigación penal comenzó a principios de este año, tras la denuncia de dos ONG: la Coalición De Rescate Infantil y el Centro Internacional de Niños Desaparecidos y Explotados.
Los primeros allanamientos fueron en febrero, en domicilios de la familia Kiczka en la localidad de Apóstoles. Varios meses después, a pesar de la gravedad del caso, se realizó otro allanamiento a cargo del Juzgado de Instrucción Penal N°4 de Apóstoles.
Según se conoció pocas horas después, En el allanamiento del 6 de agosto en la casa del diputado se secuestraron un teléfono celular, un pendrive y una computadora personal, que se sumó a la secuestrada en febrero. Entre otros objetos, se hallaron en esos dispositivos archivos MASI (Material de Abuso Sexual Infantil): más de 600 archivos de material de abuso infantil, incesto y pedofilia.
Kiczka mostró entonces todo su cinismo y confianza en la impunidad. En un reportaje con el canal Misiones Cuatro dijo que: “Jamás me respaldé en los fueros, ni mucho menos. Inmediatamente, me puse a disposición. Considero que es sumamente importante colaborar con la investigación y que se llegue a la verdad absoluta de todo esto y yo soy el que más me urge”.
Sin embargo esos mecanismos de impunidad, ligados al poder, ya estaban actuando. La sesión de la Legislatura que debía tratar el caso del diputado se suspendió. El juez Farías dictó orden de detención para ambos hermanos recién el 21 de agosto.
Era previsible: los Kiczka ya estaban lejos. No se sabe dónde, pero prófugos de la justicia.
Este fin de semana los investigadores transmitieron a los medios que “no descartan que ambos formaran parte de una red de pedofilia internacional”. A pesar de esa sospecha, de estar en una localidad fronteriza y de tratarse de personas con medios para evadirse, les dieron todas las garantías para que puedan escapar.
A muchos vecinos y vecinas de Apóstoles no les sorprende. Desde marzo venían presentando denuncias y pidiendo que se acelere la investigación, Así lo hicieron también una red de medios del lugar. Sin embargo, el poder provincial y local, así como la justicia federal que responde a Patricia Bullrich, dejaron hacer. La “libertad” de las redes de trata y pedofilia “avanza”.
El funcionamiento de redes de pedofilia en Misiones no es ninguna novedad. Tampoco que cuentan con la connivencia e impunidad de los poderes del Estado, no solo el poder político sino también el poder judicial y las fuerzas de seguridad. Por eso no se puede confiar en la “comisión investigadora” que creó la legislatura provincial con los partidos tradicionales. Solo se puede confiar en la organización independiente para exponer y desmantelar a estas bandas y defender los derechos de las infancias, empezando por la efectiva aplicación de la ESI (Educación Sexual Integral) en las escuelas y barrios.