DAMNIFICADOS SISMO. Multifamiliar Tlalpan a Sheinbaum: Que se respete nuestra forma de organización

Este jueves 23 de agosto, los vecinos y damnificados del Multifamiliar Tlalpan publicaron una carta en su página de Facebook frente a las intenciones de la jefa de gobierno electa, Claudia Sheinbaum, de realizar un recorrido por la zona.

Sheinbaum había declarado que ella “no atendería a grupos, sino casa por casa”, lo cual provocó la indignación de los vecinos del Multifamiliar que colapsó el pasado 19 de septiembre.

Su exigencia se centra en defender su organización colectiva, ya que es la forma en que ellos así se han manejado desde la tragedia del año pasado, a la vez que les ha permitido —según ellos mismos aclaran en su carta— entrar en contacto y coordinarse con otras asociaciones de vecinos y damnificados de la ciudad.

Asimismo, denuncian que en el recorrido de Sheinbaum se omiten otras zonas y predios que fueron dañados por el sismo, relegando a las familias afectadas de dichas áreas.

Lo que denuncian los vecinos del Multifamiliar Tlalpan es congruente con las actitudes que han tomado Sheinbaum y su partido, donde en temas como el Aeropuerto han comenzado a tener un acercamiento favorable con las constructoras a las que se les otorgó la licitación del proyecto. Con el sismo del año pasado, el tema de la reconstrucción es una demanda profundamente sentida por los habitantes de la Ciudad de México y en especial en las colonias que presentaron edificios colapsados.

Pero esta reconstrucción, en la visión de las autoridades capitalinas, aunque declararon ahora que dejarán fuera a las inmobiliarias, debe ir de la mano de empresas constructoras que se enriquecieron con el otorgamiento de predios y construcciones precarias, muchas de las cuales resultaron dañadas con el siniestro cuando no es que se vinieron abajo.

Por el contrario, las asociaciones de damnificados han denunciado estas prácticas y exigen que, como los vecinos del Multifamiliar Tlalpan plantean, no se vuelvan “de damnificados a deudores” por “una vivienda que ya era nuestra”.

Ante esto, desde La Izquierda Diario hemos planteado en artículos previos que debe haber un fondo para reconstrucción garantizado con la expropiación de los recursos y bienes las grandes inmobiliarias para que los afectados y damnificados no deban pagar ni un peso.

Este fondo se puede basar en recaudación de impuestos progresivos a las grandes fortunas, el no pago de la deuda externa, el fin de los megaproyectos de construcción que sólo fomentan la gentrificación de barrios históricos de la ciudad y poner en marcha un plan de obras públicas bajo supervisión y control de las organizaciones obreras, populares y de los damnificados, para reconstruir de las viviendas, infraestructura y edificios públicos colapsados o que se deban demoler.