Falta de agua, de salones, paredes electrificadas y un abandono en el barrio es lo que denunció este medio día la comunidad educativa de la escuela Serrano. Fueron acompañados por la hermana de Pocho Lepratti, quien fuera asesinado en ese establecimiento hace 20 años a manos de la policía.
Lunes 1ro de marzo de 2021 14:09
La bronca de la comunidad educativa de esta escuela de la zona sur de Rosario se hizo sentir. Están hartas de los manoseos del gobierno, de los anuncios de reformas que nunca se cumplen. La vuelta para el séptimo grado prevista para el 17 de febrero no se pudo realizar en el establecimiento por la falta de condiciones. Las chicas y chicos recién comenzarán las clases mañana en una escuela vecina. Mientras tanto el ministerio presiona a los directivos para que no se saquen fotos que evidencien el deficiente estado edilicio.
Las escuelas del barrio vienen sufriendo robos mientras están cerradas y esto también dificulta el trabajo a docentes y asistentes escolares. Esta situación encuentra explicación en la degradación social ante la creciente desocupación, la precarización laboral, la falta de acceso a salud de calidad y el control de los barrios por las bandas narco-policiales. El endeudamiento de Macri con el FMI que sirvió para financiar su campaña electoral y la fuga de capitales y el reconocimiento de esa deuda que hace el gobierno de Alberto Fernández, es una de las causales de la desigualdad social extrema existente. Se destinan las principales partidas al pago de deuda a subsidiar empresarios, a permitir estafas como la de Vicentín, pero no se garantiza agua en una escuela, ni comida saludable para los pibes.
Por eso la solución no pasa por tener presencia policial ya que esta institución es la organizadora del narcotráfico y de los diferentes delitos. Más aún, es la asesina de Pocho Lepratti aquel 20 de diciembre de 2021 en los techos de esa escuela. Trabajo genuino, vivienda digna, acceso a salud y educación de calidad, espacios recreativos es lo que necesita la juventud de barrios como Las Flores.
De la acción también participaron docentes de otras escuelas del barrio como la 1257, 407, Nuestra Señora del Valle, Nuestra Señora de Itatí quienes se acercaron en gran número.
Los abrazos solidarios que organiza cada comunidad educativa y Amsafe Rosario se vienen multiplicando ante los enormes déficits edilicio, ante la falta de recursos mínimos con agua, máscaras y sanitizantes, de vacunación y transporte. Esta es una realidad que se vive en todo el país. El gobierno nacional y los provinciales tuvieron un año para acondicionar las escuelas, pero tuvieron otras prioridades. Más aún, además de no garantizar condiciones aptas de higiene y seguridad siguen ajustando en el salario docente con ofertas del 34 por ciento que están entre 10 y 15 puntos por detrás de la inflación.
El ejemplo de la escuela Serrano, de la 1266 en Villa Gobernador Gálvez, de la 2572, del Brown en Santa Fe, de les docentes reemplazantes hay que multiplicarlo e impulsar asambleas en todas las escuelas, conformar comités de higiene y seguridad en conjunto y salir a las calles a exigir una presencialidad segura, trabajo para todos los reemplazantes y salario acorde a la canasta básica.
La conducción provincial de Amsafe viene jugando un papel lamentable, subordinándose completamente al gobierno y callando la voz de toda la docencia. La organización desde abajo es fundamental para arrancarles una Asamblea Provincial para impulsar un plan de lucha por todas las demandas de la educación.
