En las crecientes movilizaciones murcianas de la plataforma vecinal Pro-soterramiento y contra la represión en Catalunya se han denunciado más cargas y abusos policiales.
Viernes 6 de octubre de 2017
Foto: Twitter Democracia real ya
Desde el pasado 14 de septiembre se han sucedido las movilizaciones impulsadas por la Plataforma Pro-Soterramiento en Murcia contra el llamado “muro de la vergüenza”. Este muro, que circunda las vías del AVE, pretende dividir la ciudad en dos y segregar a los barrios populares de los servicios que se aglutinan en el centro, convirtiéndolos en “guetos” tal y como afirma la plataforma vecinal Pro-soterramiento.
El pasado 1 de octubre unos 50.000 vecinos de Murcia se manifestaron en el centro de la población en respuesta a la represión policial de las pasadas semanas y para continuar exigiendo el soterramiento. Vecinos de otras localidades de la provincia como Alcantarilla se han sumado a las movilizaciones.
La represión policial no se hizo esperar, como muestran las denuncias de varios manifestantes. Un caso que se ha hecho muy conocido ha sido el de una activista de la PAH, multada y vejada por los antidisturbios que se dirigieron a ella en los siguientes términos: “Ven conmigo, guarra”, "Tienes más pelos en los brazos que yo, guarra", "No te me acerques, que llevo el uniforme limpio y no quiero que se me pegue tu peste", "Con lo que saque de tus sanciones me voy a ir de fin de semana", "Seguro que no usas desodorante, asquerosa", "Como tu domicilio no es de Murcia pero dices que vives aquí, te voy a poner una tercera denuncia por domicilio falso". Después de semejantes abusos, el policía la encerró entre dos furgones para alejarla de la vista del público y le impuso dos sanciones empleando la “Ley Mordaza”.
Esta represión no ha hecho sino acrecentar la ira de los vecinos de Murcia, que han continuado con las movilizaciones y la policía ha respondido con la porra. El día 4, durante su concentración diaria, los antidisturbios intervinieron formando una columna que fue rodeada por los vecinos al grito “somos vecinos, no delincuentes”, “si usáis la violencia, allá vuestra conciencia”, o “asesinos a sueldo del poder”.
Posteriormente, se levantaron barricadas y parte del “muro de la vergüenza”, las vías y maquinaria de las obras fueron destruidas, dejando parcialmente incomunicada por ferrocarril a la ciudad de Murcia, hasta dentro de al menos 2 o 3 días según informa Renfe. La policía afirma que perseguirá a 150 “radicales infiltrados” en las protestas. Sospechamos que estas afirmaciones policiales pueden ser tan “fiables” como las del exministro Fernández Díaz cuando afirmaba que la revuelta de los vecinos de Gamonal era causada por “grupos itinerantes”.
El alcalde de Murcia José Ballesta realizó unas provocadoras declaraciones contra los activistas: “no son actos propios de la gente de Murcia”, y en una velada referencia a la represión: “entre todos evitemos estas situaciones desagradables”. El concejal de Fomento Roque Ortiz tachaba de “delincuentes a los activistas y se mofó de las movilizaciones populares: "Seguimos en esta situación de movimiento social que, al final, nadie sabe quién alienta"; "Dicen que es espontánea, y si esa es la situación, esto se va a ir espontáneamente a hacer puñetas".
El día 5 de octubre, a las 20:00 h miles de personas volvieron a concentrarse en el paso a nivel de Santiago el Mayor. Desde este lugar comenzaron una manifestación por el centro de la ciudad hasta la casa del alcalde de Murcia, José Ballesta, con la consigna “Ballesta el muro en tu puerta”. Posteriormente, se dirigieron hasta la jefatura superior de policía para denunciar su represión al grito de “somos vecinos, no delincuentes”. Para concluir regresaron al paso a nivel. Esta manifestación fue espontánea, pues había sido cancelada por la Asociación Pro-Soterramiento durante la mañana, además ésta se ha desvinculado de la destrucción del muro.
El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha afirmado que es posible que no se terminen las obras del soterramiento de vías del tren a su paso por Murcia porque la empresa contratista renuncie a ejecutar las obras. Según él, la obra "no se ejecutaría nunca". En este tono caciquil, ha entrado en liza el gobierno central para respaldar a las autoridades locales.
Así rechazaba el ministro las peticiones de diálogo de la Plataforma Pro-Soterramiento que sólo reconocía como interlocutor válido al Gobierno Central, pues la administración local está salpicada por la corrupción del AVE y sus principales ofertas a los vecinos de Murcia han sido la calumnia y la porra.
Posteriormente, Guillermo Rey, responsable de Aldesa, la empresa titular de las obras de soterramiento, ha afirmado que no descartan abandonar las obras. Esta empresa ha sido investigada y condenada en México por corrupción y por haber causado muertes a causa de la mala calidad de sus construcciones.
En otros puntos del Estado se han dado muestras de solidaridad con los vecinos de Murcia. El pasado sábado en Barcelona se llamó a una concentración en la plaza Universidad. Asimismo, la asamblea de Gamonal ha dado su apoyo a los vecinos de Murcia.
Las organizaciones policiales SUP, CEP, UFP, SPP y ASP han mantenido reuniones con el Jefe Superior de Policía de la Región de Murcia para solicitarle refuerzos. Una nueva oleada represiva contra los vecinos de Murcia se avecina, por lo que se hace más necesaria una mayor solidaridad desde el resto del Estado Español, al igual que en el caso de Catalunya, sometida a ocupación armada.
La solidaridad y un gran movimiento contra la represión en todo el Estado son las armas que nos permitirán plantar cara al Régimen del 78, que en todos lados nos muestra la misma cara.