Números del horror, detrás de ellos está la violencia de género, la trata de personas y la falta de un protocolo serio que permita encontrarlas, de manera rápida y eficiente.
Sábado 9 de enero de 2016
Según el informe Desaparición en Democracia (diagnóstico sobre la búsqueda de personas de 1990 a 2016) realizado por la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) son 3231 niñas, adolescentes y mujeres adultas que siguen desaparecidas en nuestro país.
"No todas las desapariciones están asociadas a hechos ilícitos. La naturaleza de los problemas que llevan a una persona a desaparecer varía según las edades, pero particularmente debe llamar la atención y convocar a la acción de todos la desaparición de adolescentes por problemas familiares", dice Nadya Dolcini, prosecretaria administrativa de la Protex.
Florencia Penacchi, María Cash, Marita Verón, Sofía Herrera, Érica Soriano, son algunos de los nombres que todavía se siguen gritando en las marchas, los rostros de las fotos que siguen levantando sus familiares y amigos.
Nombres que terminan convirtiéndose en “casos”, no hay que olvidar que los primeros 8 meses de 2015 se llevó a 233 mujeres víctimas de femicidios, según cifras de la organización La Casa del Encuentro.
El 2015 fue también el año del #NiUnaMenos, el año del Encuetro de Mujeres en Mar del Plata, donde miles de mujeres se enfrentaron a la misoginia y el machismo, esa semana hubo 10 femicidios.
Lo único claro es que en la agenda política no habrá lugar para los sectores más oprimidos. Este año hay que gritar más fuerte, seguir en pie de lucha frente a los reclamos de justicia para las víctimas y jóvenes desaparecidas, pero también se hace necesario la organización y poner en pie un movimiento de lucha de miles de mujeres trabajadoras, estudiantes y jóvenes combativas que sea independiente de los gobiernos se turno y la Iglesia.
