Los pasados lunes y martes, estudiantes secundaries, universitaries, que debían rendir la Prueba de Selección Universitaria, se manifestaron contra la prueba que segrega a miles de jóvenes que se quedan año a año sin derecho a poder estudiar. Hace un momento, el gobierno anunció que invocó la Ley de Seguridad Interior del Estado contra 34 personas, entre ellas hay dirigentes de la ACES.
Miércoles 8 de enero de 2020
Les estudiantes secundaries, las y los mismos que saltando los torniquetes abrimos el despertar de millones en Chile, junto a quienes durante más de dos meses hemos salido a las calles a cuestionar los 30 años de un modelo capitalista y neoliberal heredado de la dictadura, que solo tiene precarización para ofrecernos, mientras se privatizan nuestros derechos más elementales como la educación, la salud y las pensiones.
Hoy, fuimos esa misma juventud quienes comenzamos un 2020 de movilización, saliendo a las calles contra la PSU, esa prueba que muy por lejos de medir nuestros conocimientos, lo que hace es filtrar el acceso a la universidad. De 300.000 inscritos, solo 135.000 pueden entrar a la universidad. A diferencia de lo que señalan el gobierno y los empresarios, son ellos quienes le quitan el derecho a estudiar a casi un 60% de quienes rinden la PSU. Y quienes entramos, es endeudándonos o teniendo que trabajar a la vez.
Es el reflejo de la educación de mercado, de una educación para ricos y pobres. Por eso nos movilizamos el lunes y martes, y lo hicimos con el apoyo de millones de jóvenes, trabajadores, madres, padres y abuelos que bien conocen esta realidad. Por esta razón, el gobierno, que tuvo miedo de ver nuevamente la fuerza de la juventud, nos respondió con represión, con más de 100 compañeres detenides, con policías sacando armas, y hasta con el atropello de un joven con un auto policial.
Y no suficiente con eso, el gobierno preparó un ataque mayor contra la juventud. Y, luego de varias amenazas, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, anunció hace unos momentos que el gobierno invocó la Ley de Seguridad Interior del Estado contra quienes nos movilizamos, presentando 16 querellas contra 34 jóvenes, bajo el argumento de “incitar y promover desórdenes”. Entre quienes están querellados, aparece el nombre de Víctor Chanfreau, vocero de la ACES.
Nuevamente el gobierno insiste en seguir el camino de la criminalización y la represión contra la libertad de expresión. La misma que ha impulsado desde el 18 de octubre que, bien sabemos, ha dejado muertos, mutilados y presos políticos. Ya hay otros querellados por la Ley de Seguridad Interior del Estado, como es el caso del profesor Roberto Campos, por tomar un torniquete que ya estaba roto, o el de Dauno Tótoro, quien está siendo perseguido por decir en una asamblea “fuera, Piñera”.
Nos quieren sacar de las calles para impulsar la trampa de una convención constituyente en la que no podremos realmente acabar con los pilares de la herencia pinochetista, pues la derecha podrá vetar con ⅓ cada resolución. Y donde les jóvenes que despertamos Chile, no podremos ni siquiera votar por tener menos de 18 años. No podemos decidir hacia dónde deben ir las transformaciones del país, pero sí podemos ser golpeados, mutilados, encarcelados y perseguidos por la policía y por Piñera.
Cada uno de estos casos son inaceptables. El objetivo del gobierno es amedrentar a toda la juventud que ya perdimos el miedo. ¡Desde la agrupación de la juventud ‘Vencer’, solidarizamos con Víctor Chanfreau y les 34 compañeres perseguidos! ¡Decimos abajo la Ley de Seguridad Interior del Estado y cualquier tipo de querella por movilizarse! ¡Por nuestro derecho a movilizarnos, abajo la represión de Piñera!
Para defendernos de estos ataques, es necesario que el conjunto de les estudiantes, nos organicemos en asambleas de base, donde nos organicemos para echar abajo la agenda represiva de Piñera. A la vez que discutimos nuestras demandas y nos preparamos para pelear por ellas, como el fin de la PSU y una educación gratuita, financiada integralmente por el Estado y con acceso irrestricto.
¡Es necesario que la ACES, la CONES y la Confech, convoquen a asambleas de urgencia y a una movilización unificada!, haciendo un llamado a convocar junto a organizaciones sociales y de trabajadores, como el Colegio de Profesores y la Mesa de Unidad Social. Contra la represión y la persecución. Y porque ningún estudiante quede fuera de la educación. No+PSU, acceso irrestricto y por una educación pública y gratuita.
Somos miles contra la educación de mercado. Con la unidad, de estudiantes, mujeres, trabajadores y las familias de todes aquellos que quedamos fuera de la universidad, tenemos la fuerza para impulsar un plan de movilización que enfrente la tramposa convención constituyente y pelee por una asamblea constituyente libre y soberana donde realmente podamos decidir sobre la educación, la salud, las pensiones y nuestros derechos.