Para hoy 29 de agosto, los docentes han decidido comenzar un paro nacional indefinido, ante las respuestas insatisfactorias por parte del ministerio de educación. Llega un Ministro del Partido Comunista a alinearse por bajar el paro, y las y los profesores no podemos deliberar de las demandas ni del plan de lucha para conquistarlas. Necesitamos la máxima unidad desde las bases, con apoderados y estudiantes y también con los sectores en lucha, como las trabajadoras de Integra quienes también están en paro nacional.
Martes 29 de agosto de 2023
Para hoy 29 de agosto, los docentes han decidido comenzar un paro nacional indefinido, ante las respuestas insatisfactorias por parte del ministerio de educación, liderado ahora por el ministro Nicolás Cataldo, que no dan solución a las demandas históricas y urgentes, como el pago del bono al retiro, la deuda histórica, violencia escolar, pago por mención, agobio laboral, entre otras. A la entrada del nuevo Ministro del Partido Comunista, este fue claro en decir que entraba a evitar la paralización, que es un paro que “no contribuye en nada” y ahora tendrán una nueva propuesta, colocando todas las fichas en apagar la movilización lo antes posible, sin tener que cumplir de manera inmediata al petitorio planteado.
Previo a la votación llevada a cabo el día viernes, que dio por resultado la movilización indefinida que inicia hoy, la burocracia del Colegio de Profesores dirigida por Carlos Díaz, había difundido infografías mostrando la propuesta del ministro Cataldo como un avance, pero trás la votación de las bases aunque no tenía casi distinción con la primera propuesta. Frente a ello rápidamente salió el ala de Mario Aguilar a cuestionar y decir que son “migajas”, sin llamar asambleas de base ni proponer un plan alternativo de lucha y movilización. Lo cual parece más una disputa interna de Díaz y Aguilar hacia las elecciones del Colegio de Profesores y quién puede posar más a la “izquierda”, en el caso de Aguilar intentando “desmarcarse” del gobierno.
El ministro Cataldo prometió una respuesta para el día de hoy 29 de agosto, la que será evaluada en una consulta nacional entre miércoles y jueves, para decidir si dar continuidad o fin a las movilizaciones. Consulta que además no asegura ningún tipo de instancia de base, ya que muchas escuelas y liceos votan según si el dirigente “los hace votar”, muchas veces en recreos, sin discusión previa o incluso a través de listas de firmantes a favor o en contra que manejan en común con las mismas jefaturas. Sin contar que en ningún caso hay instancias de deliberación donde decidamos cuáles serán nuestros puntos intransables y cómo pelearlos.
Hoy, el Colegio de Profesores se ha reunido con la bancada por la dignidad de los trabajadores de la educación, para solicitar su apoyo para destrabar el conflicto con el Ministro de Educación. Carlos Díaz Marchant, señaló que su ayuda es necesaria porque “sabemos que mucho de los temas que hoy día estamos planteando en nuestro petitorio van precisamente en dirección de ser resueltos a partir de proyectos de ley”, además de que, “debería ayudar, mediar, buscar también puntos de encuentro con el ejecutivo para poder resolver el conflicto que hoy tenemos en educación en este país.
Es decir, tampoco vemos claridades de nuestras demandas. Exigir el pago inmediato e íntegro de la deuda histórica y de las deudas por bono al retiro, es un piso mínimo. El pago de mención a educadoras diferenciales y de párvulos, así como la inyección de recursos directo a las comunidades educativas para abordar las problemáticas de violencia y agobio laboral, con contratación de más personal multidisciplinario para abordarlo, son demandas que quieren aplazar y mantenerse en los diagnósticos que el gobierno ya entregó.
Si los dirigentes del Colegio de Profesores quisieran seriamente conquistar nuestras demandas y dejar de mantenernos como mera “masa” para sacar a la calle a presionar por migajas más o migajas menos, debería abandonar sus métodos burocráticos y divisionistas. Llamar inmediatamente asambleas de bases en todo liceo y escuela para decidir nuestras demandas y nuestro plan de lucha, convocando también a apoderados y estudiantes. Y dejar de mantenernos separados y separadas de la pelea que dan las trabajadoras de Integra, o de las movilizaciones que convocan las y los secundarios.
Las problemáticas que vivimos en todos los sectores educativos, desde la educación inicial hasta la universitaria, son transversales y para conseguir nuestras demandas debemos tener la mayor unidad desde las bases. Exijamos a las dirigentas de Integra, al Colegio de Profesores, a la FECh y la CONFECh y los Centros de Estudiantes de los liceos, que convoquen a un gran Frente nacional educativo y de unidad de las luchas, desde donde podamos coordinar nuestras peleas y enfrentar realmente la crisis de la educación.
Nancy López
Profesora. Agrupación Nuestra Clase
