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Red Internacional
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Galicia. “Non Hai Tempo Que Perder” en Vigo, construyendo una alternativa anticapitalista en Galicia

Una decena de personas asistieron el 22 de Marzo a la presentación de Non Hai Tempo Que Perder en el Café de Catro a Catro en Vigo.

Jacobo A. García

Jacobo A. García @Jacobscarface

Miércoles 23 de marzo de 2016

Foto: Rubens Rocha

En la reunión se expusieron los objetivos de la nueva formación, así como el programa y la estrategia que nos proponemos seguir para crear una izquierda para y desde la clase trabajadora.

La presentación comenzó con la intervención del compañero obrero Xosé Ramón Pazos, representante sindical por la CIGA, elegido por sus compañeros del almacén central de la gran empresa de supermercados Froiz. En primer lugar repudió los atentados de Bruselas por su brutalidad y la matanza de inocentes, pero también las guerras imperialistas y exigió a los gobiernos europeos que acojan y ayuden a los refugiados, porque hasta el momento no han hecho más que darles un trato denigrante y vulnerar sistemáticamente sus derechos fundamentales.
Hizo asimismo hincapié en la necesidad de impulsar una alternativa política que asuma las reivindicaciones sociales y democráticas que han dejado en el cajón los nuevos reformismos, como Podemos y las Mareas (más concretamente en Galicia), y los viejos como IU y el BNG. Presentó a los ponentes de la mesa y ejerció de moderador en la reunión.

La siguiente en intervenir fue Lucía Nistal, activista del colectivo ACR (Acción contra la represión) de Madrid, que viajó desde allí especialmente para la ocasión. La compañera expuso lo que fue el ciclo de movilizaciones desde el 15 M, las Mareas, las Marchas de la Dignidad y como sufrimos actualmente una pasivización de la movilización social debida sobre todo a dos factores:

Por un lado, la burocracia sindical: las direcciones traidoras de los sindicatos mayoritarios que vendieron los derechos de los trabajadores a cambio de mantener sus privilegios contratados por el gobierno son responsables de la resignación y la falta de ánimo en la clase trabajadora. Además, sus métodos corporativistas encarcelan la lucha de clases, y no permiten la unificación de distintos sectores de trabajadores, junto a los estudiantes y el resto de los sectores oprimidos de la sociedad, por lo que reducen las posibilidades de conseguir victorias.
Por otro lado, los nuevos reformismos: Podemos y sus aliados han jugado un rol pasivizador con discursos que menosprecian la movilización social, y generan una ilusión electoral de que eran estos partidos por sí mismos los que podían realizar las reformas necesarias para curar o paliar los problemas de las mayorías sociales y en la crisis económica capitalista.

Sin embargo, la compañera prosiguió la intervención relatando los numerosos ejemplos que demuestran que esta nueva izquierda no ha hecho nada o casi nada para paliar la situación económica de la clase trabajadora y el pueblo. Al contrario, en no pocos casos han de forma abiertamente conservadora. Manuela Carmena ha hecho una pésima gestión de la crisis de los refugiados en Madrid. Tuvo que ser la solidaridad de vecinos y activistas madrileños la que proporcionara a los desplazados recién llegados la asistencia necesaria. Ha justificado la represión a los titiriteros de la compañía “Títeres desde Abajo”. Mientras, su gobierno se niega a remunicipalizar los servicios públicos, echó la culpa a los universitarios de la suciedad provocada por un deficiente servicio, y propuso que fueran los estudiantes lo que limpiaran las calles sin ninguna remuneración.

El caso del gobierno de Ada Colau en Barcelona va más allá, ya que ha traicionado las reivindicaciones de los trabajadores de Telefónica, incumpliendo la promesa electoral del “compromiso de las escaleras” y se ha posicionado de parte de los directivos de TMB contra los trabajadores del metro en su huelga. Existen numerosos ejemplos de este tipo que demuestran que los llamados gobiernos del cambio, han hecho solamente un cambio cosmético, no uno real.

Por otra parte, estos nuevos gobiernos precisan en muchos casos el apoyo del PSOE, un partido de régimen ejecutor de recortes, y sufren constantemente presiones por derecha a las que ceden sin oponer resistencia. A nivel estatal tanto Podemos y aliados, y IU-Unidad Popular siguen planteando la necesidad de un pacto con el PSOE, aún después de que este cruzarse una línea roja al pactar con la derecha liberal de Ciudadanos. Por eso pensamos que IU-Unidad Popular tampoco es una alternativa.

El siguiente compañero en intervenir fue José Vargas, militante de IZAR, y ex-secretario de Podemos Málaga, que se desplazó desde A Coruña. Describió todo el proceso de ruptura de Podemos Málaga con la dirección estatal y también andaluza, que fue debido a varios motivos. El primero la estructura vertical y burocrática de Podemos, que no permitía establecer un debate democrático en la organización. El segundo el evidente viraje a la derecha que renunció a medidas fundamentales como el no pago de la deuda. Por otra parte, la cara visible de Anticapitalistas en Andalucía, que no hizo una crítica a la dirección de Pablo Iglesias, si no que pactó cargos de dirección con él, lo que precipitó la ruptura también en la antigua Izquierda Anticapitalista. El compañero hizo hincapié en la traición de Izquierda Unida en la región, con el pacto andaluz que aplicó recortes y no hizo una política favorable a la clase trabajadora y el pueblo andaluz.

Por último, cerré la ronda de intervenciones yo, Jacobo A. García, militante de Clase contra Clase, y expuse el programa y la estrategia a seguir por la iniciativa No Hay Tiempo Que Perder. Se trata de un borrador de programa elaborado por una comisión de trabajo surgida del primer encuentro estatal en Málaga. Un programa que abierto al debate en los territorios que será debatido y votado definitivamente en el encuentro estatal en Madrid el 2 de Abril.

A nivel económico destacan las medidas como el no pago de la deuda pública, la prohibición de los despidos en las empresas, la apertura de los libros de contabilidad, la reducción de la jornada laboral sin bajada de sueldo, la nacionalización bajo control obrero de toda la banca y sectores estratégicos de la producción y la paralización de los desahucios, entre otras. Pero también defendemos una serie de demandas democráticas, como la abolición del senado y las diputaciones, que los representantes públicos cobren el salario medio de un obrero cualificado, la defensa incondicional del derecho de autodeterminación, o el derecho inalienable de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.

Nosotros asumimos el gran reto de construir una alternativa política anticapitalista, feminista e internacionalista y ecologista, que se base en la movilización obrera y popular, por y para la clase trabajadora, las mujeres y la juventud. Sin rechazar la participación en las instituciones, nosotros no consideramos que ese sea el medio de cambio de la sociedad, ya que planteamos un horizonte de ruptura con el capitalismo y consideramos que la conquista de posiciones parlamentarias deben ser justamente tribunas al servicio de impulsar la movilización extraparlamentaria. Sin esta perspectiva, es imposible hacer una política favorable a los intereses de la mayoría social, en el marco de una crisis económica global.

Por otra parte, el BNG, aunque tiene un discurso más de izquierda, tampoco representa una alternativa. Su programa electoral no dista demasiado del de En Marea, excluyendo la salida de la OTAN. La gestión del gobierno bipartito con el PSOE del 2005-2009 no solucionó los problemas económicos de Galicia, no hizo nada más que enriquecerse y engrosar las filas de la corrupción. La gestión de los ayuntamientos donde gobierna el BNG, casi siempre pactando con el PSOE, o responde ni siquiera a su programa a nivel gallego. Por ejemplo, el BNG plantea la remunicipalización de los servicios públicos. Y allí donde gobierna aplica lo contrario, como en Pontevedra. O en Poio, donde le prorroga por 20 años la concesión a una empresa de basuras. Por eso planteamos, aunque reconocemos que existe mucha gente luchadora en esa organización, su dirección pequeñoburguesa y acomodada (UPG) no puede responder a las demandas del pueblo trabajador.

Entre los asistentes se encontraban miembros del centro social RSP, Alejandro Arias, militante de Clase contra Clase de Madrid, Gabriel Licht y Carla Romero Mosse, dos artistas con los que participé en una performance contra la violencia de género, Alba Cortes (militante de IZAR que vino desde A Coruña) y el periodista Rubens Rocha. Agradecemos su asistencia. La traducción al inglés para Gabriel corrió de mi parte y de Lucia Nistal.

Al concluir las ponencias se realizó un debate que tocó varios temas, entre los que destacan los ayuntamientos del cambio, Podemos o a la burocracia sindical. Alba intervino destacando que era necesario desarrollar un discurso feminista más elaborado y transversal. Lo que se debatirá mucho más en detalle en posteriores reuniones en Vigo y otros territorios, así como en el II Encuentro Estatal el 2 de Abril en Madrid.

Por otro lado, se dio un debate en relación al derecho de autodeterminación de las naciones oprimidas, y fuimos preguntados por nuestra posición al respecto. Apoyamos de forma incondicional el derecho de autodeterminación de Cataluña, y el resto de naciones oprimidas del Estado español, pero creemos que la mejor forma de conseguir este derecho es mediante la movilización de la clase trabajadora, y en alianza con los sectores populares del resto del Estado, no en alianza ni bajo la dirección de la burguesía nacionalista. Por ello defendemos la apertura de procesos constituyentes en las distintas naciones del Estado, que se organicen en asambleas libres y soberanas. Que no estén encarcelados por los estrechos márgenes del parlamentarismo y bajo la dirección de los capitalistas nacionalistas o españolistas, sino que sean impuestos mediante la lucha de clases. Procesos constituyentes que puedan cuestionarlo todo, incluso la propiedad privada de los medios de producción, en interés de la clase trabajadora y los sectores oprimidos de la sociedad.