El Chile neoliberal está agitado. Las encuestas recientes muestran apoyos de apenas 20% a los partidos y el Parlamento. Las direcciones sindicales burocráticas pierden fuerza y empiezan a ser cuestionadas por los trabajadores de base. Son varios los casos ya, desde los trabajadores de la basura, hasta los escraches a la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, pasando por la rebelión de los profesores y diferentes procesos huelguísticos.
Miércoles 10 de diciembre de 2014
La huelga de los recolectores de basura: julio de 2013
La dirigencia de la Federación de Trabajadores de Empresas de Aseo, Jardines y Rellenos Sanitarios, llegó a un acuerdo con el gobierno, durante la huelga de los recolectores de la basura en julio del año pasado.
Los trabajadores de base, concentrados en el centro de acopio de la comuna de Quilicura, cuestionaron este acuerdo, y criticaron a Armando Soto, presidente de la Federación, exigiendo que se fuera, porque ellos necesitan mejoras inmediatas.
El acuerdo con el gobierno establecía el plazo de un año para empezar a mejorar en algo las remuneraciones. El descontento de los trabajadores de base, fue tan grande, que hasta insultos recibió Soto.
Los mineros de Geoanalítica: agosto de 2013
Los trabajadores de la empresa minera Geoanalítica estuvieron durante 23 días en huelga, con la toma del recinto. Pero fueron desalojados, ya que la dirigencia sindical firmó un acuerdo con los dueños de la empresa, levantando la lucha sin consultar a la base.
La base obrera cuestionó duramente a la dirección, quienes ya venían en una dinámica de desconfianza, por lo que habían votado delegados de huelga por áreas de trabajo, a lo que la dirigencia oficial se opuso.
También los trabajadores de Correos de Chile durante su huelga, funcionaron con un sistema de delegados de base por sector. Eso posibilitó que la lucha se mantuviera en pie, aunque no pudo evitar el protocolo de acuerdo firmado por la dirigencia burocrática, que en vez de garantizarles el bono que pedían de un millón de pesos, se lo asignó en forma de préstamo a devolver.
Las trabajadoras de la Junta Nacional de Jardines Infantiles: septiembre de 2013
Las trabajadoras de los jardines infantiles entraron en paro para exigir mejores salarios. La presidenta de la AJUNJI, asociación a la cual pertenecen, Julia Requena, levantó la movilización en acuerdo con el gobierno, y eso detonó el descontento de la base de mujeres que trabajan como maestras jardineras, auxiliares, contratadas, de planta y demás.
El paro tendría una duración de 48 horas pero la dirigencia lo levantó antes, sin consulta siquiera a las bases. Las afueras de la sede de la CUT durante una masiva marcha por el centro de la ciudad de Santiago fue el escenario en donde manifestaron este descontento.
La rebelión de los profesores: noviembre y diciembre de 2014
Jaime Gajardo, presidente del Colegio de Profesores y militante del Partido Comunista (PC), llegó hace algunas semanas a un acuerdo vía telefónica con el gobierno, que solo respondía dos de los cinco puntos que el pliego de demandas de los profesores, conocido como “Agenda Corta”, exigía. Inmediatamente se gatilló el descontento de los profesores, que en muchas ciudades del país salieron al paro indefinido.
Hace algunos días, nuevamente Gajardo selló un acuerdo con el gobierno, sin consultarle ni a la Asamblea Nacional, en donde tiene mayoría. El descontento de la base es tan agudo, que no solo exigen la renuncia de Gajardo sino que desarrollaron una tendencia a la autoorganización de base, con la organización de Docentes Autoconvocados de Puerto Montt, de los Profesores Indignados de Antofagasta, y el Comité Ejecutivo Provincial de Osorno formado por un delgado de base por escuela.
Los escraches a Bárbara Figueroa, presidenta de la CUT: septiembre y noviembre de 2014
El 4 de septiembre de 2014 se realizó en la ciudad de Santiago una marcha de miles de trabajadores que se organizaron para exigir que las reformas laborales de Bachelet les garantizaran mejores condiciones de vida y de trabajo. Fue una movilización que superó ampliamente las expectativas de las dirigencias sindicales y de las organizaciones de izquierda, que no se esperaron ver en las calles tantos sindicatos y trabajadores de base. Allí, Bárbara Figueroa, presidenta de la CUT y militante PC, tuvo que proteger su ingreso a la columna que marchaba con matones, para buscar ponerse al frente mediante un método burocrático.
Dos meses más tarde, en noviembre, en medio de la movilización de los profesores en distintas ciudades del país, apareció Bárbara Figueroa en una marcha en el centro de Santiago, y los profesores la siguieron hasta las puertas de la CUT. Una vez, custodiada por sus matones y también por la policía, fue escrachada por los trabajadores de base, que le gritaban “vendida” en protesta contra sus dichos más recientes de que la movilización de los profesores estaría orquestada por la derecha.
Se trata de fenómenos antiburocráticos en las bases de los trabajadores que empiezan a ser sostenidos en el tiempo, tal vez marcando una nueva tendencia. A esto se unen fenómenos inéditos en Chile como la organización en base a delegados.
