A tres semanas del Operativo Aprender, Esteban Bullrich ya comienza su política de premios y castigos. Entregarán $2.500.000 a las 10 escuelas elegidas, mientras recortan recursos en el resto.

Hernán Cortiñas Docente delegado de UTE-CTERA
Martes 4 de octubre de 2016
El jueves pasado Macri encabezó el acto de entrega del concurso "Maestros Argentinos". Se trata de una iniciativa del Ministerio de Educación destinada a premiar con fondos para recursos a 10 escuelas de todo el país, mientras que miles de establecimientos no cuentan con las condiciones mínimas de enseñanza.
Como muestra basta un botón. El secretario de Gestión Educativa, Max Gulmanelli, a principios de agosto declaró: “visitando establecimientos de todo el país, notamos que se han repartido muchos libros, pero se ha leído poco de ese material”. Con esto justificaron que no entregarán los 5 millones de ejemplares previstos en el presupuesto para este año. Además ya anunciaron la decisión de que no se comprará más literatura para las escuelas secundarias. Un claro castigo en el juego meritocrático macrista.
Esta política de recortes no se limita a los libros. En los primeros 9 meses del año, se usó apenas el 10,94 por ciento de los fondos nacionales previstos para el programa de Innovación y Desarrollo de la Formación Tecnológica; el 19,16 por ciento de lo pautado para Infraestructura y Equipamiento; el 31,35 por ciento en Acciones Compensatorias; y el 30,94 por ciento en Formación Docente. Es imposible que se revierta esta tendencia en tres meses, lo que dejará un claro saldo ajustador en la educación pública. Un castigo a la escuela pública.
La Meritocracia como excusa del ajuste en educación
Cambiemos está preparando el terreno para seguir avanzando en recortes del presupuesto educativo. Para eso se sirve del discurso meritocrático: evaluar para elegir a dónde van a destinarse los fondos públicos, con una lógica de competencia mercantil.
En este contexto no sorprende el lanzamiento del concurso "Maestros Argentinos". A través de esta competencia entre escuelas se repartirán dos millones y medio entre las 10 elegidas. La primera ganará $1.000.000; la segunda percibirá $500.000, la tercero, $400.000, la cuarta, $300.000, la quinta, $200.000 y las 5 restantes $100.000 cada una.
Para que no queden dudas sobre los criterios de selección utilizados, armaron un comité evaluador integrado por ONGs reconocidas internacionalmente por su línea neoliberal y privatista (Oscar Ghillione de Enseñá x Argentina, Agustina Blanco de Educar 2050, Agustina Cavanagh de Cimientos y Alejandra Cardini de CIPPEC) y funcionarios macristas. Otro ejemplo más de cómo están metiendo a los intereses de empresas privadas en la dirección de la educación pública.
Se trata de un ensayo a pequeña escala del plan delineado con el Operativo Aprender. Según demuestrandocumentos de los organismo internacionales que recomiendan este tipo de evaluaciones, “el primer paso son las pruebas a los estudiantes, con una divulgación transparente de los resultados”; “el segundo paso ha sido la adopción del pago de bonificaciones a nivel de las escuelas, mediante el cual se establece el concepto de pago por desempeño y las escuelas se centran en el progreso del aprendizaje del alumno” y el tercero, la evaluación de los docentes “en forma individual y de manera voluntaria, con el atractivo de recompensas financieras para los profesores que asuman el riesgo de ser evaluados y demuestren un buen desempeño”.
Millones para los ajustadores, descuentos para quienes defienden la educación
Según datos publicados por el ministerio de Modernización, Esteban Bullrich cobra $152.908 por mes, rozando los dos millones anuales. Su principal tarea está siendo justificar recortes en la cartera educativa, creando un sistema de premios y castigos para quebrar la resistencia.
Mientras tanto, la docencia, que sostiene la educación pública cada día incluso poniendo plata de sus bolsillos, debe trabajar dos o tres cargos para llegar a fin de mes. Como si fuera poco, en la Ciudad de Buenos Aires ya realizaron descuentos de miles de pesos por las protestas por reapertura de paritarias. Una verdadera provocación: al reclamo de que el sueldo no alcanza responden reduciendo los salarios.
El gobierno se niega a reabrir la paritaria salarial y se prepara para lanzar el Operativo “Aprender 2016”, cuyo fin último es establecer el salario por mérito, clasificar escuelas y atacar la estabilidad laboral de la docencia, sin contemplar las múltiples y diferentes realidades de la escuela. Intentan avanzar con una reforma educación neoliberal por medio de evaluaciones estandarizadas. Una política que ya fracasó en Estados Unidos, como reflejan hasta Los Simpsons.
Defendamos la educación pública desde cada escuela
Estos diez meses de gobierno de Cambiemos demuestran con creces que es un gobierno de y para quienes poseen la riqueza y el poder. Es una casta que se llena de privilegios a cambio de legislar y gestionar en favor de los empresarios.
Ante estos ataques es necesario contraponer la lucha por una mejor educación pública, partiendo del reclamo de un aumento inmediato del presupuesto educativo al 10 % del PBI: para implementar un plan de construcción de escuelas que garanticen el derecho a la educación desde los 45 días y reformar la jornada laboral docente a 6 horas, con un salario mínimo igual a la canasta familiar y un tope de 4 horas frente al curso, destinando el resto del tiempo a tareas de corrección, preparación de clases y capacitación en servicio. Sólo así podremos garantizar las condiciones de enseñanza y de aprendizaje necesarias para mejorar la educación pública.
Por todo esto, es imperioso rechazar el Operativo “Aprender 2016” y lograr su anulación. Para ello, es preciso tomar el plan de lucha en nuestras manos, desarrollando un fuerte y profundo debate y exigir desde cada asamblea de escuela, distrital o provincial a la conducción de Ctera un paro nacional de 48 horas el 18 y 19 de octubre, con asambleas por escuelas que rechacen el operativo para, de este modo, derrotar de una vez las reformas neoliberales de Macri y el Banco Mundial.