Viernes 2 de marzo de 2018
Se acerca el 8 de marzo, día internacional de la mujer, fecha en la que nos saludan, en los trabajos nos entregan tarjetas, chocolates y flores; lo cual tiende a difuminar el real carácter de esta fecha.
El 8 de marzo se conmemora en homenaje a las obreras textiles, que a inicios del siglo XX murieron en Nueva York en una huelga luchando por mejores condiciones laborales; por tanto no es solo el día de la mujer a secas, es el día de la mujer trabajadora, trabajadora que se organiza y lucha por transformar sus condiciones de vida.
A inicios del siglo XX en Chile las obreras también se organizaron, las mujeres entraron a la vida laboral, en establecimiento fabriles, manufactura de alimentos, textiles, vestuario y como empleadas domésticas. Hacia 1907 las mujeres constituían casi un tercio de la población trabajadora, sin embargo, su salario no era ni la mitad de lo que ganaban los obreros, trabajaban más de 14 horas, sin descanso, en paupérrimas condiciones laborales; no se consideraba ninguna protección a la salud, ni siquiera por accidentes laborales.
Sin instituciones que les brindaran protección, las y los trabajadores formaron mancomunales, mutuales, sociedades de socorro mutuo y de resistencia, canalizando acciones de asistencia y solidaridad, que luego fueron tomando un carácter más político protagonizando las primeras huelgas y organizándose contra las injusticias y la explotación.
Las organizaciones de obreros de multiplicaron, y las mujeres también formaron sus primeros espacios de organización para luchar por su emancipación desafiando el rol social de madre, productora y amante de su familia.
¿Quiénes fueron las mujeres que impulsaron estas organizaciones?, ¿Cuáles fueron sus nombres?
La historia de la clase obrera no se ha rescatado, y menos aun a las obreras que protagonizaron las primeras luchas, aquí algunos nombres a rescatar en esta fecha.
Teresa Flores (1891 – año desconocido)
Fue la primera mujer dirigente sindical en Chile que organizó a las mujeres obreras en sociedades y centros de reunión. Una de las fundadoras del Partido Obrero Socialista en 1912, pionera del empoderamiento femenino, fundó el Centro Anticlerical y de Libre Pensamiento Belén de Sárraga en el norte, los que luego se expandieron por todo el país. Fue parte de la creación del Concejo Federal Femeninos al interior de la FOCH.
Tomo en sus manos la tarea de educar y organizar a los obreros de salitre con escritos, charlas y obras de teatro donde se desempeñó como actriz de los conjuntos teatrales. Junto a su compañero Luis Emilio Recabarren recorrieron la pampa y el país realizando conferencias dedicadas a la educación y organización de las mujeres proletarias.
Esther Valdés (1897 – 1908)
Denunció las precarias condiciones laborales de las mujeres trabajadoras, abogando por la instrucción y la organización. Trabajó como obrera corpiñera, es decir, confeccionó las prendas de vestir que antiguamente usaban las mujeres para sostener el busto. Su experiencia como trabajadora la llevo a transformarse en activista para mejorar las remuneraciones de las obreras y denunciar el abuso que significaba trabajar 14 horas diarias durante 7 días de la semana.
Su principal tribuna para luchar por el trabajo digno fue la prensa escrita, en particular en los periódicos “La Alborada” (1905- 1907) y “La Palanca” (1908) prensa obrera feminista. Fundó la Asociación de Costureras “Protección, Ahorro y Defensa” para generar lazos de cooperación entre las afiliadas y luchar por mejores condiciones laborales.
Su legado aportó a la promulgación de la ley del descanso dominical, la ley de la silla para empleados y obreros y la ley de sala cunas en los establecimientos donde trabajaran mujeres.
Eloísa Zurita Arriagada (1976 – 1941)
Primera feminista del norte de Chile que lucha por organizar a las mujeres en pro de conquistar la igualdad. Periodista, escritora autodidacta escribió en los principales periódicos obreros, incursionando en las letras y la poesía. Fundo a primera organización feminista del norte, la “Sociedad de Obreras, instrucción y socorro mutuos Nº 1” en 1894.
Se casó a los diecisiete años con Adolfo Vergara, carpintero y militante del Partido Democrático que fue asesinado en 1906 en las huelgas de Antofagasta. Eloísa Zurita fue una agitadora, participó en numerosos encuentro obreros a lo largo del país.
Su principal aporte fue la reflexión respecto a las condiciones laborales de explotación de las mujeres proletarias, y la organización de las mujeres para su desarrollo y progreso.
Estos son algunos nombres de las primeras obreras que se organizaron, de los cuales, sin embargo, aun queda largo por camino por rescatar. Este 8 de marzo vamos a marchar en su memoria no solo pasada, sino que presente.
¡8 de marzo con la fuerza de la mujer trabajadora!