La figura de Cambiemos volvió a ponerse en el centro de la polémica. El exabrupto fue para promocionar su fama de “denunciadora”. Sigue su gira y algunos aliados de Cambiemos ya se preocupan de cuál será su próximo derrape.
Martes 23 de abril de 2019 19:58
Elisa Carrió está en Córdoba apoyando la candidatura del radical Mario Negri. En medio de una charla en Cruz del Eje, la diputada nacional de la Coalición Cívica y referente de Cambiemos volvió a derrapar.
"Gracias a Dios murió De la Sota, porque ahí sabrían qué es una denunciadora", dijo. Y luego agregó que “lo que todo Córdoba tiene que plantearse hoy es quién maneja la droga”.
La primera frase abrió un debate en Córdoba que luego recorrió el país. El agradecimiento festivo ante la muerte del ex gobernador generó polémica y repudio. Además, si no fuera un tema delicado, la amenaza solo podría generar risas. ¿Por qué ahora “sabrían qué es una denunciadora” si tuvo la oportunidad de hacerlo durante los 30 años en que De la Sota ocupó cargos políticos?
La familia del ex gobernador peronista exigió disculpas. "Presidente @mauriciomacri, espero que le pida a su socia política @elisacarrio que se disculpe de inmediato conmigo y toda mi familia por la inmensa barbaridad que dijo sobre la muerte de mi padre. No todo vale para conseguir votos", publicó la hija mayor en las redes sociales.
La otra parte de la frase también dejó tela para cortar. “Lo que todo Córdoba tiene que plantearse hoy es quién maneja la droga”. Una parte de la respuesta ya es conocida. En los últimos años se comprobó que parte de la cúpula de la policía provincial está involucrada en el narcotráfico a través de su sociedad con las grandes bandas. ¿Carrió intentó además un tiro por elevación al actual gobernador de la provincia?
No lo dejó claro, pero si fuera así el que exigirá disculpas es uno de los gobernadores peronistas más cercanos a Cambiemos. El ex empleado y viejo amigo de Mauricio Macri, Juan Schiaretti.
En medio de la crisis económica y la caída de la imagen del gobierno, las polémicas de Carrió podrán distraer la atención por unas horas, pero pueden convertirse en otra braza caliente dentro de la golpeada coalición Cambiemos.
