Carpetazo ordena el gobierno de Peña Nieto, muy cuestionado por los sucesivos escándalos de corrupción, entre ellos los protagonizados por el ex gobernador de Chihuahua. Javier Corral, gobernador de Chihuahua, reclama. Contraataque del PAN en la guerra electoral.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Jueves 15 de marzo de 2018
César Duarte, ex gobernador, estaba acusado de utilizar recursos públicos para tener una participación del 15% de las acciones del Banco Progreso Chihuahua, por un monto de 65 millones de pesos. Se había abierto una carpeta de investigación por defraudación fiscal, lavado de dinero y delito bancario.
Pero la Procuraduría General de la República (PGR) anunció este miércoles que no ejercerá acción penal con la notificación entregada a Jaime García Chávez, abogado y activista.
El panista Javier Corral, actual gobernador e impulsor de la demanda, de Chihuahua declaró: “Este es un mensaje a la sociedad, brutal: impunidad, exoneración, protección, para los pillos que pertenezcan al PRI; persecución política, uso faccioso de las instituciones de PGR y Hacienda, en contra de opositores políticos al presidente de la República”, expresó, de acuerdo a un comunicado. “El manejo de la PGR desde la Presidencia de la República ya es vergonzoso, está provocando al pueblo de México en su irritación y pone en riesgo la gobernabilidad del país”.
Por su parte, García Chávez publicó en su cuenta de Facebook “Continuaremos dando la batalla ante los tribunales, recuérdese que tenemos un juicio de amparo pendiente de resolución. Como siempre, manifiesto mi indeclinable decisión de continuar la lucha contra la corrupción política de los priístas. No nos vamos a dejar”.
El abogado había declarado en diciembre pasado a Aristegui Noticias “César Duarte no pudo acreditar jamás de dónde sacó 65 millones. Y Jaime Herrera no podrá acreditar nunca que tenía la calidad de apoderado del banco y al mismo tiempo de Secretario de Hacienda, y que privilegiaba a su banco con los depósitos del gobierno y que además ese banco era apalancado desde el estado… (era un) drenaje de billetes públicos hacia el banco para darle un tamaño, una estatura que nunca tuvo”. Agregó entonces “La materia penal, peculado, tráfico de influencias, el uso abusivo de atribuciones está más comprobado”.
Con este carpetazo a favor de César Duarte –que aun puede enfrentar un amparo o una declaración de incorformidad del denunciante-, sólo quedan investigaciones por sospecha de delitos electorales a nivel federal, y en Chihuahua hay 11 órdenes de detención en contra del exgobernador.
Mientras tanto, al mismo Duarte se le han decomisado más de 20 bienes inmuebles, entre ellos ranchos del tamaño de todo el municipio de Chihuahua, capital estatal. Sigue siendo miembro del PRI, y Peña Nieto no suelta aun su mano. Se rumora que teme a los secretos que pueda revelar el exgobernador, implicado en la estafa maestra.
Fue Ricardo Yáñez Herrera, ex Secretario de Educación, Cultura y Deporte del estado, quien reveló en diciembre de 2017 a una red de funcionarios para desviar millones de pesos. Los integrantes eran el ex gobernador Duarte, su ex Secretario de Hacienda, Jaime Herrera; el ex director de Adquisiciones, Antonio Enrique Tarín; el ex Director de Administración, Gerardo Villegas, y el ex Secretario General de Gobierno, Mario Trevizo, entre otros funcionarios.
A su vez, el mismo Yáñez Herrera declaró que Manlio Fabio Beltrones envió un mensaje a Gutiérrez Gutiérrez en el que le avisaba que el dinero que supuestamente recibió el CEN del PRI, “ya no tendría retorno”.
El panista Corral denuncia la impunidad y la corrupción del PRI, pero Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición Por México al Frente (PAN, PRD y Movimiento Ciudadano) y también miembro del blanquiazul, está acusado también de lavado de dinero. Todos los partidos que gobiernan al servicio de los empresarios, que promovieron y aplican las reformas estructurales y la entrega de los recursos a las trasnacionales, tienen cola que le pisen.
El temor de Peña y su gobierno a las revelaciones que pueda hacer César Duarte parece ser todavía mucho más fuerte que el temor a un desgaste mayor de su partido, de su gobierno y las instituciones. La decisión de la PGR de dar carpetazo al caso del exgobernador seguramente tendrá un impacto negativo en la alicaída campaña electoral del PRI hacia los comicios presidenciales.