Política de farándula. Palazuelos "amenaza" con ajustar cuentas a quienes le hacen "guerra sucia"

Roberto Palazuelos, actor y precandidato de Movimiento Ciudadano a la gubernatura de Quintana Roo, adelantó que "cuando llegue" a la gubernatura del estado "ajustará cuentas" con quienes le hacen campaña sucia. La amenaza vino durante la entrevista que le hicieron en el programa De Primera Mano de Grupo Imagen.

“A mí ninguna guerra sucia me va a parar y todas esas gentes que están difamándome, que están diciendo cosas, yo estoy apuntando, eh, no crean que no estoy apuntando. Ya llegará el momento, cuando yo sea titular del Ejecutivo, que ajustemos cuentas”, fueron sus palabras exactas.

Primeramente Palazuelos replicó a una extrabajadora que intentó demandarlo. "Esta señora es una señora que hace como ocho años me demandó laboralmente y el juicio nunca le prosperó porque yo nunca fui su patrón, su patrón era una compañía (…) Quedó muy herida y ahora se presta a estar diciendo cosas y demás", detalló el también empresario.

Pero sus palabras revelan mucho más de lo que nos quiere hacer creer. Primero, porque las acusaciones vertidas en su contra son por el hecho de que en el hotel propiedad de Palazuelos reciben la instrucción de reciclar la comida de los comensales, lo cual es un riesgo higiénico grave. Segundo, porque, como él mismo señala, formalmente él no era el patrón, lo cual significa que la trabajadora afectada se encontraba en una relación de trabajo subcontratado, es decir, de outsourcing . Pero de que se aprovecha del trabajo de la señora y sus compañeros de trabajo lo tenemos muy claro, puesto que lo hace despachándose con la cuchara grande a través de este mecanismo de explotación laboral.

El subcontrato precisamente es un mecanismo que permite que los patrones y empresarios puedan hacer el tipo de negocios que hace Palazuelos, en los cuales los propios trabajadores, testigos de las malas prácticas de higiene y salud, no pueden levantar la voz contra sus superiores, ya que, como lo muestra el caso de Palazuelos, aunque quisieran, legalmente no están sujetos al contrato de servicios de la empresa principal.

A esto se suma la amenaza de "ajuste de cuentas" del "actor─político" ya que, con la prepotencia que caracteriza a los capitalistas,los funcionarios y demás personajes que pululan en los partidos electoreros al servicio del gran capital, Palazuelos anuncia que "cuando sea titular del ejecutivo" —¡con total certeza cuando ni siquiera ha sido nombrado candidato oficial!— responderá a los ataques en su contra. En un contexto de asesinatos a periodistas, defensores del medio ambiente y luchadores sociales, las palabras de Palazuelos no merecen ser tomadas a la ligera, pues si bien no tiene segura la cndidatura, sacó a relucir la forma de pensar de los políticos del viejo régimen, priístas, panistas, perredistas e incluso de muchos de la "transformadora" 4t.

Este es otro ejemplo de la famosa "puerta giratoria" en la que empresarios pasan a ser políticos y viceversa y también de que cuando la clase dominante no tiene a quien poner a competir recurre a gentes de la farándula, ignorantes y sin escrúpulos con tal de ganar votos. Y este tipo de gentes es lo que vemos sexsenio tras sexenio en las instancias legislativas del poder judicial y funcionarios de gobierno dedicados a saquear el erario nacional a expensas del esfuerzo de quienes verdaderamente trabajan y mueven la maquinaria productiva del país.

Particularmente, Palazuelos ha sido noticia a lo largo del año (que cabe señalar, apenas va empezando su segundo mes). Apenas hace unas semanas circularon en redes imágenes del actor y empresario golpeando a una mujer luego de tener un percance vial. Si bien varios miembros de Movimiento Ciudadano en sus redes sociales repudiaron la actitud de Palazuelos y sus amenazas, cabe preguntarse cómo es que un personaje así pretende representar a los quintanarroenses y por qué la formación naranja permite que esté entre sus filas.

Políticos como Palazuelos, alfiles del empresariado nacional, tristemente abundan en México. Lo que no se ven son políticos obreros que defiendan un programa anclado en los intereses de la clase trabajadora, que perciban un salario mínimo equivalente a lo que perciben una maestra o una enfermera y que el resto lo donen para fortalecer las luchas obreras y cajas de resistencia de trabajadores en huelga.

Para combatir a los políticos de los capitalistas es necesaria la organización independiente de los trabajadores, jóvenes y mujeres en un partido que defienda un programa anticapitalista y socialista, que no tolere entre sus filas a empresarios y que ponga sus energías en fortalecer la unidad de la clase obrera en combate contra los ataques del capital. Por ello es necesario romper toda confianza en todos aquellos partidos, como Movimiento Ciudadano, el PRI, el PAN y demás partidos pro-patronales, que afirman escuchar las demandas de los ciudadanos mientras gente como Palazuelos integra sus filas.