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Red Internacional
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Homenaje. Palo Pandolfo: el miserable oficio de escribir obituarios

Jueves 22 de julio de 2021 16:30

Voy caminando por el mercado de flores del DF Mexicano y me llega la noticia de que se murió Palo. Un amigo que me quiere me pide que escriba algo. Porqué lo conocí, toqué con él una noche, tomamos whisky, la rockeamos. Y lógico me da bronca. Vaya a saber de qué se murió, un sistema de salud colapsado y la muerte más inexplicable que conociera mi generación y las posteriores, no puede ni darte una autopsia. Al cabo que ni me importa.

Cuando se murió Horacio González, hace poco, escribí una nota sobre las cosas que tuve la suerte de hacer con él. Ahora se muere Palo. No voy a escribir su obituario. El género literario más morboso que se me ocurriera. Mis palabras son para la vida y sobre la vida.

Pero me pongo a pensar y también escribí cuando se murió el gran Andrés Rivera.

Pero yo no escribo obituarios, ¿Quién me manda a escribir sobre los muertos? Y me doy cuenta que no estoy escribiendo sobre los muertos, sino que estoy dando testimonio, como documentalista y revolucionario, de cómo las ideas y las personas de los que queremos cambiar este mundo de raíz, tuvieron y tendrán una relación profunda con la cultura popular, con los más altos momentos de creatividad de nuestro pueblo.

En esa faena me crucé con tipos increíbles, tuve la suerte de que me marcaran, de dejarme influir por su linaje de trasnoches embrujadas, llenas de relatos y tristezas de sobrevivientes de las mil y un penas que nos exorcizamos cantando, llorando y amando.

Escribo sobre mi, porque es mi forma de hablar de todos, cuando digo todos me refiero a una totalidad que nos encuentra siendo víctimas del abuso que hace el capitalismo con nuestras vidas.

Capaz Palo se murió de bronca al ver a Jeff Bezos irse al espacio de turismo mientras países como la India, Argentina, Brasil, México, no podemos salir del espiral mortífero de la desidia y la sinrazón.

Qué se yo para qué escribo. Para mis amigos. Para que tengamos más fuerza. Para terminar de reventar esta muerte capitalista.