El Gobierno no convoca a la paritaria nacional docente y ofrece migajas a los docentes bonaerenses; mientras condona la millonaria deuda de Franco Macri. Los gremios docentes se reunen con la CGT y amenazan con no iniciar las clases.
Viernes 10 de febrero de 2017 10:55
El martes pasado en el Consejo Federal de Educación, el ministro Esteban Bullrich ratificó que dejaría en manos de las provincias la responsabilidad de las paritarias y que garantizaría el sueldo mínimo de 9672 pesos. Quieren borrar la paritaria nacional.
Por su parte, María Eugenia Vidal propone a los más de 300.000 docentes de la provincia de Buenos Aires un aumento salarial acorde al ajuste que promueve Cambiemos para el conjunto de los trabajadores.
Mientras tanto perdonan la deuda del Correo Argentino dirigido por su padre, Franco Macri, en más de $70 mil millones. Una pizza y media para los docentes y miles de millones para sus negocios. Un escándalo.
El gobierno de Vidal y Cambiemos con el apoyo de la oposición del Frente Renovador de Massa y el FpV-PJ en la Legislatura bonaerense, recortó en un 3,2 % el presupuesto educativo 2017. Esto afecta directamente la educación de los casi 4 millones de niños y niñas que estudian en las escuelas de la Provincia.
Todos los gremios rechazaron la oferta, pero de plan de lucha ni una palabra. Hasta el momento, solo promesas de lucha y resistencia.
Gremios docentes se reúnen con la CGT: mucho ruido y pocas nueces
En el día de ayer los cinco gremios docentes más importantes a nivel nacional se reunieron en la sede nacional de la CGT, con el objetivo de formar una mesa común y exigir al gobierno de Mauricio Macri que “cumpla la ley” y convoque a una paritaria nacional para el sector.
Contradictoriamente, la CGT convocó al paro nacional con 50 días de antelación, post morten de la paritaria docente, paritaria testigo que marcará el rumbo para el resto de los sectores. Luego de la reunión se realizó una Conferencia de prensa donde por parte del Triunviranto de la CGT, Hector Daer manifestó el apoyo a los maestros. El mejor apoyo sería el llamado a un paro nacional y plan de lucha para unificar todos los reclamos.
Por su parte, CTERA le dio tregua al Gobierno nacional durante el año pasado, y los sindicatos provinciales dirigidos por la Celeste de Alesso y Baradel garantizaron paz social a los gobernadores, ya sean oficialistas u opositores. Para enfrentar este ataque es necesario desarrollar un profundo proceso asambleario en todo el país y en la provincia de Buenos Aires para discutir, votar e impulsar un verdadero plan de lucha provincial y nacional en defensa de la educación pública, por aumento salarial y en unidad con el conjunto de los trabajadores como lo hicimos en el día ayer junto a los trabajadores de AGR, cortando accesos, rutas y puentes, demostrando la unidad en las calles contra este plan de ajuste que solo nos traerá más hambre e incertidumbre al pueblo trabajador. La semana próxima se comenzará con asambleas por escuela, de allí tiene que surgir la fuerza para construir un plan de lucha nacional que se le imponga a las diletantes conducciones
