En el último trimestre los salarios metalúrgicos cayeron un 4%. La conducción del gremio lanza amenazas pero ninguna medida de fuerza ni asambleas para las patronales que la siguen levantando en pala.
Lunes 10 de julio de 2023 11:00

Julio arrancó con una muestra clara de la situación de los trabajadores y trabajadoras metalúrgicas. Mientras en los medios se anuncia con bombos y platillos el lanzamiento del gasoducto Néstor Kirchner, o la venta de electrodomésticos, quienes producen ven como su salario se sigue deteriorando por la inflación.
Si uno toma el acumulado abril-mayo es del 16,2%, y hace un cálculo conservador de la inflación de junio (7%) los metalúrgicos habrán perdido 4 puntos de salario real en la última negociación paritaria.
Con ese malestar por abajo, la conducción de la UOM está concurriendo a las reuniones paritarias con un pedido a las patronales de que mejoren la oferta. Sin embargo, en las dos primeras reuniones no hubo avances.
¿Qué pide la UOM? Un aumento para junio que ayude a empatar esa pérdida del poder adquisitivo, firmando un 10% de aumento, y acordar un 30% para el tramo julio, agosto y septiembre. Además pide un bono. Según su titular, Abel Furlán, "para que los trabajadores puedan respirar un poco una suma fija no debería ser menor a los 50 mil pesos".
Los dichos de Furlán hacen ruido. Conformarse con que los metalúrgicos puedan “respirar un poco” cuando la industria ha crecido en los últimos meses, así como la producción, no parece una buena defensa de sus representados. Quizás por eso, ese “crecimiento” que muestran las estadísticas fue a parar a los bolsillos patronales. Los estudios de un instituto cercano al oficialismo, CIFRA, aseguran que la transferencia de ingresos de los obreros industriales a las empresas en los últimos años aumentó un 18%. O sea se quedaron con un pedazo más grande del reparto de la riqueza generada en el sector.
Un caso emblemático es, justamente, el gasoducto Néstor Kirchner. Tenaris (Techint), el principal encargado de la producción de los tubos, va a quedarse con ganancias récords. Sin embargo, sus trabajadores y trabajadoras hace un año trabajan 7 días a la semana, gran parte con contratos de 3 o 6 meses.
Este jueves 13 de julio habrá una nueva audiencia. Sin embargo, durante el cuarto intermedio la UOM no viene haciendo ninguna acción que permita expresarse a quienes están cansados de perder en salario y condiciones de vida.
Mínimo, la UOM debería convocar asambleas en todas las fábricas, para discutir un plan de lucha y elegir paritarios de base que lleven adelante una verdadera pelea por recuperar el salario.