El gobierno de Vidal, de manera sorpresiva, convocó a los gremios estatales de la provincia a una reunión paritaria con el objetivo claro de cerrar con ese sector estatal y meter presión a la paritaria docente.
Viernes 12 de octubre de 2018 21:39
Ofreció primero un aumento del 8% para lo que queda del año pero ante la negativa de los gremios y luego de un breve cuarto intermedio terminó planteando un 11%, que en realidad es del 9%, mientras se estima que solo la inflación de septiembre habrá sido cercana al 7%. Los salarios estatales llegarán a un 27% de aumento en cuotas durante todo el 2018 cuando la inflación se prevé por arriba del 42%.
UPCN y los gremios de Fregepba aceptaron sin ninguna consulta a las bases, haciéndole un nuevo favor al gobierno de Cambiemos. Y ATE rechazó pero sin plan de lucha o medida de acción urgente que permitiera expresar ese rechazo activamente y mostrara a los estatales dispuestos a dar pelea.
Se consagra así un nuevo saqueo al bolsillo y los niveles de vida de los trabajadores del estado provincial que, junto a los municipales, son los peores pagos y los que más han perdido en relación a la inflación.
Así el salario estatal inicial será de $15.825,35 y el promedio rondará los $17.500 mientras que la línea de la pobreza que midió el propio Indec para el mes de agosto fue de $20.868,93 y según el cálculo que realiza la Junta Interna ATE –Indec en base a una canasta de consumos mínimos, ningún trabajador debería ganar menos de $33.131. Los estatales ganan la mitad de lo que necesita como mínimo una familia trabajadora para vivir.
Los gremios convalidan la miseria salarial sin ninguna medida de lucha y así buscan allanarle el camino a Vidal hacia la presentación del presupuesto provincial que está negociando con los bloques del PJ y el FR, donde los trabajadores del estado, la educación y la salud públicas así como las áreas sociales, que ya vienen atravesando un profundo proceso de vaciamiento, serán el blanco del ajuste según los dictados del gobierno nacional y el FMI.
Pero fuerzas hay. La lucha de los trabajadores del Astillero Rio Santiago que vienen resistiendo los planes de ajuste de Vidal es seguida y acompañada por decenas de miles de estatales. Los docentes siguen en lucha por el salario y las condiciones de trabajo, así como los trabajadores de la salud y los judiciales de la provincia.
Hay que impulsar junto a ellos la coordinación y la más amplia unidad en las calles. Este 18 de octubre habrá una nueva acción en la capital bonaerense anunciada a través de los medios por esos gremios. Será la antesala al día que se trate el presupuesto nacional, donde las centrales sindicales tienen que convocar a un paro nacional activo que permita rodear el Congreso con una masiva movilización y desarrollar un plan de lucha nacional que culmine en una huelga general, capaz de derrotar el ajuste de Macri, los gobernadores y el FMI.