Ante 5 despidos y la posibilidad de que se produzcan más, las obreras y obreros de la planta de Avellaneda de SIAM realizaron un paro. Los despidos allí suman cerca de 100 en lo que va del año.
Sábado 23 de abril de 2016
Mientras la dirigencia de la UOM encabezada por Antonio Caló sigue realizando anuncios de posibles medidas recién a partir de mayo, los despidos se suceden en l industria metalúrgica por todo el país. Algunas de las fábricas donde hubo despidos en el último par de meses son Acindar, Bambi, Electrolux y Axel en Santa Fe (donde cerró Paraná Metal y amenazan cerrar otras metalúrgicas), Atemys (tercerizada de Siderca), Motorarg en Lanús y SIAM, donde los despidos suman alrededor de 100 en lo que va del año.
En la planta de Avellaneda se cerraron dos de los turnos y quedó solo uno, y las trabajadoras y trabajadores vienen sufriendo descuentos en sus salarios de forma completamente arbitraria. Ante los nuevos despidos quienes trabajan allí, bajo condiciones sumamente precarias, decidieron parar con permanencia en el lugar de trabajo, como medida de lucha para detener los despidos y lograr que se reinstale a los cesanteados.
SIAM es una de las fábricas que el kirchnerismo levantó como representativa en cuanto a la recuperación de puestos de trabajo con la reapertura de la misma luego de que el grupo Newsan invirtiera en la planta industrial 35 millones de dólares, durante la gestión del intendente de Avellaneda Jorge Ferraresi. Hecho que fue anunciado con bombos y platillos lo mismo que el acto de apertura a fines de abril de 2014, en el que participaron la expresidenta Cristina Fernández y el exgobernador Daniel Scioli, además del intendente de la ciudad, que hasta el momento no dio una respuesta a los trabajadores despedidos.
En este marco, los anuncios de Antonio Caló de la UOM resultan completamente insuficientes ya que se están dejando pasar los despidos, descuentos, suspensiones e imposición de vacaciones anticipadas en todo el gremio desde hace meses. Estamos ante una nueva demostración concreta del cinismo del presidente Mauricio Macri al anunciar ayer desde la avícola Cresta Roja que se está reactivando la economía y recuperando fuentes de trabajo.